Un niño de nueve años fue golpeado y aparentemente ahorcado por su padre el pasado domingo primero de enero en el barrio Carlos Meisel, luego de que este le recriminara por un cable de teléfono celular.
Al parecer, Leonardo Matuti, señalado de la agresión, se percató que alguien le había desconectado su celular que había dejado cargando minutos atrás y abordó al niño señalándolo como el culpable del hecho, para posteriormente, según señalan testigos, atacarlo con puños y tomarlo fuertemente del cuello.
De acuerdo a vecinos del sector, el menor solo fue liberado porque logró señalar a su hermano como el verdadero responsable de la acción que desató la ira de su padre, que le dejó un golpe en la frente y varios hematomas alrededor del cuello.
Posterior a esto, el cuadrante de la Policía de la zona fue alertado de la situación y los agentes trasladaron el niño al Camino La Manga.
Trascendió que la víctima se encontraba en Barranquilla de visita a la casa de su progenitor por la festividades, sin embargo, en uno días se había estipulado su regreso a Yopal, Casanare, de donde es originario y vive con su madre.
Por el momento, familiares del menor habrían interpuesto una denuncia contra Matuti, sin embargo, su paradero actual es desconocido.