¡Espeluznante! A una niña en Cartagena “le apareció” una muñeca en la pierna izquierda

Un misterioso hecho tiene aterrorizados a los habitantes del barrio Boston, en Cartagena. Una niña de 11 años se llevó una escabrosa sorpresa este jueves cuando se bañaba para ir al colegio.

En una historia publicada por El Universal de Cartagena, relatan que la menor alertó a sus familiares luego de que en su pierna izquierda apareciera una espeluznante figura. Según relató la madre de la niña, era una muñeca volteada, la cabeza iba del lado de la rodilla y los pies con dirección a la cintura.

En ese momento creció el miedo. Aseguraron que no se trataba ni de un tatuaje, ni una mancha. Era algo parecido a una cicatriz.

¿Brujería? Ni los mismos familiares de la niña se explican qué era, pero recuerdan que durante la noche escucharon varios ruidos que venían de la cocina y sintieron como si una persona entrara y saliera por la ventana. Lo aterrador no termina allí. A la niña la llevaron hacia un curandero del barrio y con tabacos y rezos comenzó su ritual. “la muñeca se movía dentro de la pierna y bailaba al ritmo de la música que salía de una vivienda vecina. También se reía. Cuando el santero dejó de fumar y echó cenizas en la pierna, empezó a salirle babaza de la piel como si tratara de residuos de café", contó la madre.

Luego de haber visitado al curandero, la niña seguía con la muñeca en la pierna, así que decidieron llamar a unos pastores cristianos. Según los familiares, cuando comenzaron a orar, la niña entró en desespero, tiró la biblia y decía que se quería ir del sitio. “Ella sacó una fuerza impresionante y nadie podía aguantarla, tenía un espíritu que se reía, los ojos se le pusieron rojos. Cuando le preguntaron quién lo había mandado, quién le dio permiso de entrar a ese cuerpo, él habló a través de mi hija y dijo que había sido una persona alta y flaca”, siguió relatando la mujer.

Después de esa revelación sobre quién era la persona que ordenó tal cosa, el “demonio siguió con la burla”, pero alcanzó a revelar su identidad, que coincide con el nombre de una vecina de la familia. De acuerdo con el relato, el espíritu salió, pero la muñeca seguía allí, un poco borrosa.

La madre de la niña dijo que fue hasta donde la mujer, con quien al parecer tuvo un problema hace 17 años, pero esta supuestamente no dio la cara.

La familia de la pequeña afirmó que la mujer involucrada dijo que no era su culpa y que la figura que tenía la niña era un tatuaje. Entonces propuso hacerle unos exámenes en Medicina Legal, pero ellos no aceptaron quisieron dejar todo en “manos de Dios”.