Como las duras batallas musicales que libró en la telenovela Escalona, el actor barranquillero Rodrigo Obregón Osorio, recordado por su papel de Anastasio Espuelas o El Espuelón, luchó hasta el final contra la muerte; pero infortunadamente no pudo mantenerse en pie.
El artista, que heredó el legado de su padre, el pintor Alejandro Obregón y su madre, la coreógrafa Sonia Osorio, murió ayer a las 2:51 p.m. tras estar hospitalizado desde el pasado 21 de septiembre, según reportó la Clínica Portoazul en un comunicado en el que explica que Obregón padeció una neumonía grave y también lidiaba con los múltiples síntomas derivados del cáncer de próstata. “Esto conllevó a su fallecimiento en la Unidad de Cuidados Intensivos”.
El actor, fue uno de los primeros colombianos en llegar a Hollywood, en donde participó en películas como Hawaii, triángulo mortal (1987), L.A. Wars (1994) y Daño colateral (2002), compartiendo set con la súper estrella Arnold Schwarzenegger. Obregón tenía pendiente el estreno de tres cortometrajes (Damaged, The Aftermath y Curtain Call).
También fue corresponsal de guerra del Ejército colombiano, agregado a una unidad de las Fuerzas Especiales de Infantería de Marina. En esta labor, cubrió las guerras civiles de El Salvador y Nicaragua entre 1981 y 1984.
El Espuelón el fin de semana pasado estuvo en la Feria Internacional del Libro de Barranquilla. Allí dialogó con varios colegas y les manifestó su intención de crear un museo a su madre Sonia Osorio, de quien heredó el Ballet Nacional que lleva su nombre y otro a su padre, el cual pretendía construir en Prado Mar, donde pasó sus últimos días.
El secretario de Cultura, Patrimonio y Turismo de Barranquilla, Juan José Jaramillo contó que “el jueves pasado hablamos de lo que sería el Ballet de Barranquilla ‘Sonia Osorio’. Tuve el privilegio que me trajera y diera el primer afiche del ballet, que fue una obra del maestro Alejandro Obregón”, contó a AL DÍA.
Agregó que siempre se preocupó por mantener vivo tanto su legado paterno como el materno. “Estaba trabajando en la ruta ‘Se va el Caimán’ para tributar a su padre Alejandro Obregón y también quería exaltar la obra de su madre, esa promotora de la danza, que hizo que el mapalé se vistiera de gala en los mejores escenarios del mundo y la cumbia se bailara de cuadritos”.
‘TENÍA MUCHA FUERZA Y ENERGÍA’
Por su parte el actor barranquillero Ignacio Hijuelos, contó que junto al fallecido artista rodaron en Bogotá la telenovela ¡Ay cosita linda mamá! (1997).
“Él era uno de los protagonistas y yo como de costumbre hacía de antagonista. En esa producción también estuvo Ángela Vergara, Salvatore Basille y el venezolano Andrés Izaguirre. Yo era Aníbal León, El Guajiro y él Camilo De la Rosa, quien se trenzó una lucha con el venezolano por conquistar a una niña rica costeña”, contó.
“Recuerdo mucho que nosotros por ser costeños auténticos éramos los reyes de la producción, él aunque era algo medio callado, siempre lucía sonriente y bromeábamos mucho, enseñábamos palabras muy nuestras al venezolano para que luciera mucho más cercano a su personaje y creo que fue una de las producciones que más me gocé a su lado”.
Afirma con certeza que, “aunque ningún muerto es malo”, realmente Rodrigo “tenía un corazón muy noble y a nivel actoral destaco su carácter, tenía mucha fuerza y energía. Además era muy disciplinado, era muy puntual, no tenía ínfulas de nada, a mí de hecho jamás me habló de su experiencia al lado de Schwarzenegger. También le gustaba mucho hacer ejercicios y tenía una fuerza descomunal en sus manos”.
El actor será velado hoy en Jardines de la Eternidad desde las 9:00 a.m. hasta las 2:00 p.m. A las 3:00 p.m.
Su cuerpo será trasladado a Bogotá.
Con información de: Por: Jonathan Díaz y Estefanía Fajardo.