Una década fue suficiente para que los verbeneros gozaran al ritmo de La Pantera Rosa, dibujo animado cuya serie está cumpliendo 50 años. Entre 1974 a 1984 se realizó en la carrera 43 No. 56-48, barrio Boston, un baile que llevó el nombre de este peculiar felino que se convirtió en ícono de la cultura popular.
Manuel Roa Ávila fue el creador de este espacio decorado de rosado, luces de neón y en cuya programación sobresalía la música Disco y Rock and Roll. Cuenta que es amante de este dibujo animado y por eso no dudó en crear un espacio en el que se le rindiera culto.
Desde que se prendía el picó El Gran Picasso, el galán de la salsa (único que amenizó esta verbena), sonaba el famoso jazz creado por el músico estadounidense Henry Mancini, cuyos saxofones identifican la banda sonora de esta serie. “Fue un hit desde el debut, era un baile de caché en el que la mayoría de la gente llevaba alguna prenda alusiva a la serie que estaba muy de moda en aquel entonces en Barranquilla. El hombre pagaba y la mujer no, por lo que siempre tuvimos un buen público”, contó Roa a AL DÍA.
Dos años después la junta de la Corporación Autónoma del Carnaval les exigió que nombraran a una reina y también crearan una comparsa que identificara al baile, es así como nace Fandango en Rosa, integrada por los vecinos de Boston quienes causaron sensación en la Vía 40. Las mujeres con sus vestidos rosados, los hombres con pantalón blanco y camisa rosa. “También teníamos una mascota que se disfrazaba del dibujo animado y hacía unos pases muy gracioso. Generalmente bailábamos fandango y cumbia, pero el público le pedía que bailara como se veía en la serie. Ese año nos declararon fuera de concurso debido a la gran aceptación que tuvimos”.
Pese a que en sus alrededores quedaban otros bailes con mucha más antigüedad como Macheteros, La Fogata, Tremendo Guandú y La Crema Fantástica, siempre que abría sus puertas se llenaba. Incluso cuenta el propio Roa que muchos se sintieron intimidados, al punto que una vez le cortaron los cables eléctricos. “Desde entonces optamos por contar con planta eléctrica, algo que también nos dio caché”.
TOCARON LOS GRANDES
Por esta verbena se presentaron grandes estrellas de la música popular costeña, entre los que se destacan: Joe Arroyo, Juan Piña, La Niña Emilia, Los Soneros de Gamero, Dolcey Gutiérrez, Aníbal Velásquez, Rufo Garrido y Binomio de Oro, estos últimos los más taquilleros. “A esa verbena llegaban unas 2.000 personas, pero el día que se presentó Rafael Orozco y El Pollo ‘Irra’, se salió de control, hubo mucha gente que no pudo ingresar y hasta en las afueras el público disfrutó. Esa verbena me representó mucho dinero, incluso la casa que hoy tengo en Boston la compré con las ganancias”, concluyó Roa.
Pero como en muchos negocios, la bonanza cesó y luego de que subieran los impuestos, el baile se hizo poco rentable y La Pantera Rosa en Barranquilla llegó no volvió a gozar. Tras su paso quedan recuerdos de muchos que se conocieron, tejieron su romance y hoy permanecen en matrimonio gracias a este singular baile. También a Roa le quedaron tres Congos de Oro los cuales le otorgó la Corporación Autónoma del Carnaval de Barranquilla en 1977, 1980 y 1982.