La preocupación continúa. El estado del boxeador Luis Quiñónez, quien fue trasladado de urgencia al Clínica General del Norte el pasado sábado después de desvanecerse en el ring cuando tenía un combate en Barranquilla, sigue siendo delicado.
Este lunes, después de dos días en cuidados intensivos y en los que no se había conocido mucho sobre la salud del pugilista, finalmente el hospital donde se encuentra emitió un comunicado de prensa hablando de la salud del oriundo de Barrancabermeja.
“El paciente Luis Andrés Quiñónez Guzmán, ingresa a la Institución el día 24 de septiembre de 2022, con deterioro neurológico producto de trauma craneoencefálico por contusiones traumáticas craneales secundario a su actividad profesional de boxeo, quien después de unas horas del combate presenta somnolencia progresiva, obnubilación, con postura de descerebración a los estímulos centrales”, explica el hospital.
“En ese momento la reactividad y anatomía pupilar no es evaluable, con escala de glawsgow (escala que mide el estado de conciencia en casos de trauma cerebral y evalúa respuesta ocular, respuesta motora y respuesta verbal valor normal 15/15 ) menor de 8 por lo anterior requiere intubación orotraqueal y ventilación mecánica invasiva para protección de la vía aérea y neurológica”, añade.
“Se solicitan estudios complementarios, es valorado por Neurocirugía, evidencia en Tac simple de cráneo un hematoma subdural frontoparietal izquierdo, el servicio de Neurocirugía realiza craniectomía descompresiva frontoparietal izquierda, se deja bajo sedoanalgecia durante 48 horas, con medidas antiedema cerebral y neuroprotecciòn plena y todo el soporte multisistemico del caso durante las próximas 48 horas”, complementan en la misiva.
Del mismo modo, después de explicar su caso, la clínica expresó que, actualmente, el pugilista, que ya lleva cinco años viviendo en la ciudad, tiene “pronóstico muy reservado”.
“Pronóstico muy reservado para la vida y la función con alta morbimortalidad, lo cual se ha informado ampliamente a sus familiares”, concluyó el hospital.
El púgil se desplomó en el último de los ocho asaltos a los que estaba pactado el combate por el título nacional welter junior, luego de un intercambio de golpes en los que dejó de responder a su contendor José Muñoz y no recobró el conocimiento.