La breve historia de los almacenes 100% criollos que marcaron a los colombianos
El TÍA cerró sus puertas después de 77 años de servicio.
Recientemente se conoció la noticia de que después de 77 años al servicio de los colombianos los Almacenes TÍA cierran sus puertas, todo por motivos económicos. “Ya no podemos más”, confesó Antonio Menier, director de la cadena en una conferencia con los trabajadores.
De acuerdo con Caracol Radio, el anuncio lo hizo público la tesorera del Sindicato nacional de trabajadores de Almacenes TÍA, Luz Mary Sánchez, quien tuvo la responsabilidad de notificarles a los 550 empleados de la empresa sobre la decisión que, desde los directivos, se había tomado. La mujer agregó que los trabajadores recibirán una “propuesta de indemnización, para que se vea como un retiro voluntario”.
Uno de los factores que afectaron las ventas en los almacenes, según Sánchez, fue el Tratado de Libre Comercio. “Eso y todos los productos chinos que entraron al país y afectaron la industria nacional”.
Asimismo, la tesorera aseguró que Almacenes TÍA nunca le avisó al sindicato, ni tampoco tuvieron en cuenta la propuesta de algunos empleados para poder salvar la empresa de la situación en la que se encontraba.
Estos tradicionales Almacenes TÍA, tienen sus sedes en Barranquilla, Sogamoso, Tunja, Bucaramanga, Cúcuta, Girardot, Barrancabermeja y en Bogotá. En total son 12 almacenes con un depósito en el municipio de Faca, Cundinamarca.
Pero más allá de estos icónicos almacenes, los colombianos han visto como otros negocios cien por ciento nacionales se han cerrado con los años o se mantienen vigentes en algunas ciudades del país. Aquí les contamos algo de historia de estos comercios.
ONLY
Foto tomada de: alamacenesonly.com
Según informó El Tiempo, Almacenes Only nació en 1954 y fue fundado por José Rodríguez. La historia detrás de este almacén es un claro ejemplo de perseverancia. Rodríguez fue desplazado por la violencia, se casó en 1956 con Lilia Moncada, ambos unieron su pasión y conocimientos en la confección. Así fue como esta pareja logró salir adelante. El primer local fue en Chapinero (Bogotá) y actualmente cuentan con 12 almacenes en la ciudad. Esta cadena se diferencia de las demás por su política de precios bajos.
LEY
Foto tomada de: Eje 21.
Almacenes Ley fue fundado en Barranquilla en 1922, por el antioqueño Luis Eduardo Yepes, quien 20 años después falleció.
A pesar de que Yepes había fallecido, la empresa siguió creciendo hasta extenderse en varias ciudades del país. En 1959 fue vendida a Cadenalco, la sociedad Gran Cadena de Almacenes Colombianos.
En 2001, Canadelco dejó que el Éxito se hiciera cargo de las tiendas, pero años después la tienda desapareció.
TRES ELEFANTES
Foto tomada de: Portafolio
Esta empresa tiene como objetivo la comercialización de ropa, juguetes, electrodomésticos a bajo costo, tanto así que el lema de las tiendas Los 3 Elefantes es “Bueno, bonito y barato”. Este almacén se inauguró en 1972 y actualmente, según reportó El Tiempo, tienen tres tiendas en Bogotá, una en Chía, una en Sogamoso y una en Neiva.
FACOL
Foto tomada de: Bogotá Compra
Estas tiendas nacieron en 1959, sus confecciones son 100% colombianas y se dedican a la comercialización de estas.
LAFAYETTE
Foto tomada de: Dinero
Esta empresa es una de las más antiguas, lleva más 70 años en la industria textil. El primer almacén abrió sus puertas en 1942 y desde entonces ha sido un gran generador de empleo. Actualmente cuenta con más de 2.000 empleados y 21 puntos en el país. Esta marca se ha expandido por Ecuador, Perú, México y Costa Rica.
YEP
Foto tomada de: Dinero
Después de 50 años de servicio a los colombianos, los almacenes Yep cerraron sus puertas en 2016. La primera tienda fue en Neiva y luego se extendió por otros municipios del Huila. El fundador fue Manuel Yepes, hermano de Luis Yepes, creador del Ley.
CASA ESTRELLA
Foto tomada de: Mapio.net
Casa Estrella era una buena opción para los barranquilleros, pero esta cadena comercial se vio obligada en cerrar sus puertas en 2006 en Barranquilla luego de que estuviera intervenida durante unos años por el Estado, según publicó Portafolio. Esta situación fue difícil porque la empresa no podía recibir tarjetas de crédito ni cheques por sus ventas y toda la operación, incluyendo el pago a sus proveedores y empleados debía hacerlo en efectivo.
