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Historias

Caso Gina Rivera: "El ex de mi hija nos dice que le vamos a pagar toda la bulla que hemos hecho"

Familiares de Gina Paola Rivera realizaron un plantón en la sede del Instituto de Medicina Legal para que se agilicen los protocolos y les entreguen el cuerpo de la mujer para darle cristiana sepultura.

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  • Familia de Gina Paola Rivera Toloza, desaparecida y hallada muerta, exige la entrega de su cuerpo para darle sepultura.
  • Madre de Gina Paola, desesperada, pide celeridad en la entrega, temiendo una espera de hasta cuatro meses.
  • Compañeras de trabajo recuerdan a Gina Paola y apoyan a la familia en su petición de justicia y descanso.

El tiempo no se detiene y la desesperación de la familia de Gina Paola Rivera Toloza, de 31 años, tampoco: este martes 27 de agosto su madre y varios allegados resolvieron llegar hasta la sede del Instituto de Medicina Legal con la finalidad de exigir la entrega de su cuerpo para darle cristiana sepultura.

El cadáver de la mujer fue encontrado el pasado domingo 18 de agosto, enterrado en el patio de una vivienda ubicada en el barrio Ciudad Paraíso, de Soledad. Todo eso después de que transcurriera más de un mes desde el momento en el que sus allegados la reportaron como desaparecida.

Pasados casi 10 días desde dicho hallazgo, y tras las labores forenses adelantadas por el CTI de la Fiscalía, hoy la familia de la mujer pide celeridad en los procesos pendientes, cuyo plazo entregado parece ser de tres a cuatro meses.

“Ya se imaginará cómo estamos nosotros. Estoy muy desesperada, quisiera que me entregaran a mi hija para darle sepultura. ¿Qué más vamos a esperar?, no quiero aguardar tres meses, ni cuatro. Nos dijeron que nos acercáramos a la Fiscalía para que me dieran una orden y acá nos daban respuesta”, fue el clamor inicial de Aracelis Toloza, madre de Gina Paola.

Entre los motivos que le dieron acerca de la demora aparentemente se encuentra la falta de huellas digitales para lograr su total identificación. “No le han encontrado las huellas. También como tenía tanto tiempo enterrada, no sé qué le habrá hecho ese hombre. El llamado que les hago a las autoridades es que, por favor, me entreguen a mi hija. Haremos todo lo posible. La justicia vendrá después de parte de Dios, ellos verán si lo arrestan o no lo arrestan”, suplicó.

Los rumores que asocian a la expareja de Gina con otro supuesto feminicidio es otra de las preocupaciones que actualmente aborda a la familia Rivera Toloza.

“Por ahí se comenta que Deiser (Toloza Epalza) anda diciendo que le vamos a pagar toda la bulla que hemos hecho. Debe estar huyendo, yo no lo he visto, ni a su familia. Yo le decía a Gina que se cuidara, pero ella me respondía que no le iba a pasar nada”, afirmó la madre, recordando un episodio en el que, al parecer, los hijos pequeños fueron los que evitaron que su papá cometiera una tragedia con Gina Paola.

Recuerdos de las compañeras

“Gina merece descansar en paz, somos compañeras de trabajo y necesitamos que nos entreguen a nuestra amiga. Su familia y su madre la esperan, al igual que sus hijos y compañeras”, se podía leer en una de las pancartas que tenían a las afueras de Medicina Legal.

Una compañera del trabajo, quien no quiso identificarse por seguridad, la recordó como una “persona muy alegre”.

“La conocí en la empresa, tengo siete años de estar laborando allí. Cuando ingresé andaba conmigo para arriba y para abajo. Nos duele porque era una persona súper alegre, la recochera de la sala. Solía inventarse cosas y de verdad que es muy triste que le quiten la vida de esta forma”, expresó su compañera de trabajo.

“Queremos que la entreguen. Sabemos que está muerta y que ya no nos acompañará más, pero quisiéramos que descansara en paz. Que no la anden moviendo de aquí para allá. La extrañamos demasiado. La alegría de la empresa se acabó. Laboramos porque ese es nuestro compromiso, pero sinceramente todo cambió desde que ella desapareció”, finalizó la mujer.

El día que finalmente los familiares no supieron más de ella, Gina Paola Rivera había cuadrado con sus compañeras de trabajo para ir comprar ropa. Puesto que, el “fin de semana iba para un cumpleaños y quería verse como una reina”.

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