El pasado 31 de diciembre de 2022 se conoció que Rudy Narváez Camacho, el contratista que pertenecía a la empresa Air-e, falleció tras no resistir a la fuerte herida de cuchillo recibida por un individuo el pasado jueves 29 de diciembre en el barrio Simón Bolívar.
Este domingo 1 de enero, Óscar Julio Narváez Camacho, hemano de la víctima, contó a este medio su versión de los hechos: “Él estaba haciendo una reconexión y tropezó el cable del asesino, porque este es un asesino. El tipo salió a reclamarle, a insultarlo y allí le propinó una herida cerca de los testículos y le afectó la vena femoral y una arteria. Le sacó un cuchillo para matar con doble filo, con una punta de flecha”.
A su vez, exigió a las autoridades una condena severa para el agresor que cometió el hecho de sangre: “Que le caiga todo el peso de la justicia a este señor. No vamos a permitir que este asesinato quede impune. Debe pagar su pena en la cárcel. Es un peligro para la sociedad, es un desquiciado”.
Por su parte, Jesser Josué Rodríguez Altamar, el señalado de cometer el crimen, fue imputado en primera instancia por el delito de tentativa de homicidio; no obstante, ahora será judicializado como homicida.
Óscar Narváez también destacó las cualidades de su ser querido: “Mi hermano era una persona muy noble, trabajadora y honesta. Era una persona que veía un indigente y le llegaba a pedir, él le compraba su café con leche, su buñuelo. Si veía a un perrito callejero le compraba el concentrado y se lo daba. Era una persona muy humana. No sé por qué le ocurrió este hecho tan desastroso, si era una persona demasiado buena”.
Cabe mencionar que la víctima, de 43 años, residía en el barrio El Campito de Barranquilla y laboraba como electricista desde hace 25 años. Se dedicaba a realizar cortes de luz e igualmente a las reconexiones. Era el quinto de siete hermanos, tenía una pareja sentimental y no tuvo hijos.