Javier Acosta, el joven bogotano que se someterá a la eutanasia
Javier Acosta, el joven bogotano que se someterá a la eutanasiaImagen tomada de Facebook
Historias

El mensaje de Javier Acosta horas antes de la eutanasia: “Disfruten”

El bogotano pidió la eutanasia tras luchar cinco años contra una infección que le produjo una bacteria que contrajo en una piscina en Melgar.

Compartir en:
Por:
  • Javier Acosta, bogotano de 36 años, optó por la eutanasia tras cinco años de lucha contra la osteomielitis, una infección ósea causada por una bacteria.
  • La decisión se tomó tras advertencias médicas sobre la posible pérdida de sus piernas y la expansión de la infección hacia su cabeza.
  • Acosta se despide con el apoyo de su hija, dejando un mensaje sobre la importancia de disfrutar cada instante de la vida.

Javier Acosta, el bogotano de 36 años hincha de Millonarios FC que se someterá a la eutanasia este viernes 30 de agosto tras luchar durante cinco años contra la osteomielitis, una infección ósea causada por una bacteria que contrajo en una piscina en Melgar, dijo que se irá “con ganas de seguir en este mundo cumpliendo muchos sueños”.

También puedes leer: A 'Ozuna' lo mataron a bala en una terraza del barrio Pumarejo en Soledad

En una reciente entrevista con el programa ‘Los Impresentables’ de la emisora ‘Los40’, Javier Acosta, quien hace nueve años quedó en silla de ruedas tras un accidente de tráfico, explicó que tomó la decisión de someterse a la eutanasia luego de que los médicos le dijeran que había la posibilidad de que perdiera sus dos piernas.

“Tomé la decisión porque me dijeron: ‘Hay un tratamiento que puede durar año y medio, por la vena, pero se pueden comprometer sus extremidades inferiores‘”, dijo.

En días pasados, el bogotano había detallado que la bacteria “es una levadura que se alimenta hasta de los mismos antibióticos. En el momento estoy con tres antibióticos. Me sacaron sangre, un estudio aquí, un estudio allí, y encontraron que la bacteria se desplazó más y más hasta llegar no solamente al hueso, sino a tejidos y la tengo en la sangre".

Al ver que no hay un tratamiento que le garantice una recuperación total y que la infección ha comenzado a desarrollarse en la cabeza, Javier Acosta decidió que prefería someterse a la eutanasia que vivir en un hospital esperando a que la osteomielitis acabara con su vida.

“No hay tratamiento que valga. Además, me salió un ganglio interno en la cabeza. La infección ya me llegó a la cabeza, lo que no me permitiría hablar”, señaló a ‘Noticias Caracol’.

Una de sus mayores motivaciones en todo este proceso ha sido su hija de 11 años, quien le ha manifestado su apoyo con respecto a la eutanasia, según relató Javier.

“Es tan madura que se sentó en mi cama acá, en el hospital, y me dijo: ‘papi, te voy a decir una cosa: te amo con mi vida. El primer amor de una hija, de una mujer, es el papá. Eres mi vida’”, recordó.

“Papá, te amo, pero prefiero que estés con Dios a verte seguir sufriendo en una cama”, agregó la pequeña, según el relato del bogotano.

En el programa ‘Los Impresentables’, el hincha de Millonarios FC afirmó que se encontraba tranquilo en las horas previas a su muerte asistida, con la esperanza de que haya vida después de la muerte y poder encontrarse con sus abuelas y otros aficionados al club que han fallecido.

“Para mí la vida es un ratico, yo soy fiel creyente de que cuando la vida se pone a cuadritos, que se ponde dura de tanto sufrimiento, uno tiene que sonreír. (...) Yo nunca me imaginé decir: 'Me muero el viernes a las 12’”, expresó.

También aseguró que se quedará con las ganas de cumplir muchas metas que tenía para su vida, la de su hija y familia en general.

“Hoy se va un barra brava, un hincha, un papá, un hijo, un gran ser humano, un loquillo. Y se va con todas las ganas de seguir viviendo, se va con esas ganas de seguir aquí en este mundo cumpliendo muchos sueños, metas”, sostuvo.

Por último, envió un emotivo mensaje a quienes estaban escuchando la entrevista a través del programa radial: “disfruten cada instante, con sus amigos, con sus parceros, no esperen a que maten a un amigo para que le digan: ‘Loco, lo quiero’”, no esperen a que maten a un parcero, a un barra para llevarle flores a casa”.