Mediante la Ley 1275 de 2009 el Gobierno incluyó en la Constitución Nacional una política pública para personas de talla baja, reconociéndoles su condición de discapacidad. Y el jueves pasado el presidente Juan Manuel Santos firmó la Ley 109 de 2016, que establece el 25 de octubre como Día Nacional de las personas de talla baja.
De esa manera Colombia adoptó una manifestación que surgió en 2013 en México, donde escogieron este mismo día para homenajear a Billi Barty, actor norteamericano con enanismo, pionero en la lucha de los derechos de sus semejantes.
Pero ¿qué tanto ha cambiado la vida para estas personas a raíz de la sanción de estas dos leyes? “Que tengamos un día dedicado a nosotros nos permite pensar que comenzarán a cumplir con tantas promesas hechas que aún no cumplen”, expresó Yesid Enrique Zúñiga Puello, barranquillero diagnosticado con acondroplasia, uno de los 200 tipos de enanismo que existe, y que afecta a uno de cada 25 mil niños.
‘QUIERO SENTARME Y TOCAR EL SUELO’
Dueño de una personalidad gigante, Zúñiga, más conocido como ‘Yesid, el Grande’, sostuvo que es feliz con sus 123 centímetros de estatura, no obstante encuentra muchos obstáculos en su diario vivir: tomar un bus, ir al baño en un centro comercial y sentarse en un parque, le resulta complicado.
“Montar en Transmetro durante las horas pico es un problema, uno sale oliendo a de todo y nos ‘rayan’ (roces incómodos) con frecuencia”, sostuvo Yesid. “Tomar una silla azul es imposible, no existen para nosotros, porque no somos ni ancianos, embarazadas o discapacitados, ¿qué tal?”, añadió.
José Pugliese Esmeral | César Bolívar
La molestia de Zúñiga es justificada por el Gobierno, que en la Ley 1275 de 2009 artículo 1o., determinó que “las personas con enanismo gozarán de las mismas garantías de la población en condición de discapacidad”.
La ley también exige, en el artículo 3o., que se aplique en los instrumentos de ordenamiento territorial, urbanístico y arquitectónico mediante los cuales se promueva la modificación de barreras que impidan el fácil acceso y libre desplazamiento de personas con enanismo. “No siento que la ciudad esté cambiando para incluirnos. En cualquier parque faltan bancas acordes con nuestras características”, agregó Yesid, de 38 años.
BUSCAN MEJORES OFERTAS DE EMPLEO
‘Yesid, el Grande’ inició su vida laboral como payaso. Su carisma lo llevó a forjar un nombre que le trajo éxito en el humor local,incluso fue protagonista del video para la canción El muñeco, de Hansel y Raúl. Pero a pesar de que Yesid encontró su sustento en medio de luces y micrófonos, asegura que las personas de talla baja no deben ser contratadas “solo para actos en los que requieran enanos para divertir a la gente”.
Asegura que ellos también tienen derecho a ocupar cargos importantes en cualquier empresa. Así como Yesid, su similar José Gregorio Pugliese Esmeral considera que la oferta laboral a personas con enanismo pudiera no limitarse a bailar en un carrovalla o perifonear.
Yesid Enrique Zúñiga Puello | César Bolívar
“En mi caso estudié análisis y programación de computadores esperando trabajar en algo afín, pero no, la estatura fue el impedimento oculto para que no me tuvieran en cuenta”, comentó José, de 40 años y 1.40 metros.
“Solo tuve un empleo como ejecutivo en una empresa, fui auxiliar de cartera por recomendación de una tía que trabajaba allí. A los 5 años me despidieron al igual que a ella”. La legislación otorga beneficios tributarios a las empresas que vinculen a personas en condición de discapacidad, pero pareciera que eso no fuese estímulo necesario para la contratación de ciudadanos de talla baja.
¿CUÁL ES EL IMPACTO CULTURAL?
La razón por la cual no emplean a personas con enanismo pudiera venir ligada a una respuesta cultural por parte de personas de estatura regular, así lo explica Jazmín Rojas Zárate, terapeuta ocupacional de la Universidad Metropolitana, y además madre de una niña con hipocondroplasia, enfermedad congénita que se manifiesta por talla baja.
Jazmín Rojas y la bella Gabriela, orgullosa de sí misma | Cortesía
“En Colombia no somos formados para aceptar la diversidad. No contratan a un mal llamado enano por el simple hecho de no ver en la oficina a alguien diferente”, precisó Jazmín. Rojas tiene una hija de 6 años, su nombre es Gabriela.
“Desde los 3 añitos identificó su esquema corporal y lo que hice fue fortalecerla en su aceptación, explicándole que todos somos diferentes así sea en una mínima expresión, por ejemplo, color de piel”, continuó. Por vocación y mediante manifestaciones en redes sociales, Jazmín ha venido celebrando desde los últimos años el 25 de octubre que hasta esta semana se hizo Día Nacional en Colombia.
“Quiero que las autoridades vean lo que estás personas necesitan, que les cumplan con los derechos que por ley merecen”.Yesid, quizá el personaje con enanismo más famoso de Barranquilla, aseguró que no existe una sola fundación en la ciudad que vele por sus derechos, mucho menos un programa distrital que los cobije. “Ojalá eso no les quede grande y algún día nos tengan en cuenta”, sentenció.