La Fiscalía presentó ante un juez de control de garantías a Yerdinson Bolívar Bolívar, alias Arenca, como uno de los responsables del secuestro de los padres del futbolista Luis Díaz.
En junio de 2023, alias Octavio del ELN solicitó una cita a Andrys Bolívar, cabecilla de Los Primos, para planear un ataque contra Luis Manuel Díaz, padre del futbolista Luis Díaz.
El encuentro tuvo lugar en Guayacanal, San Juan del Cesar, buscando puntos débiles en la vida de Díaz para un secuestro millonario.
Yerdinson Bolívar, alias Arenca, un entrenador de la escuela de fútbol del jugador, fue el infiltrado que proporcionó información clave para el plan.
Corría la primera semana de junio del 2023 cuando Jeiner Villa Herrera, alias Octavio, quien se presentó como un comandante del Ejército de Liberación Nacional, ELN, le solicitó una cita a Andrys Alcides Bolívar, alias el Negro, un comerciante de divisas que –además– era el cabecilla de una banda conocida como Los Primos, que delinquía mediante la modalidad de outsourcing criminal en el sur del departamento de La Guajira.
El encuentro, que se dio en la entrada del corregimiento Guayacanal, en jurisdicción de San Juan del Cesar, a poco más de 40 minutos de distancia del municipio de Barrancas, tenía como objetivo dejar las bases listas para propinar un nuevo ataque ilegal que, a priori, dejaría una millonaria renta extorsiva. El objetivo era Luis Manuel Díaz, padre del extremo guajiro Luis Díaz, un tipo bonachón y querido por todos. No faltaba a una parranda, ni ‘pelaba’ celebración. Era el rey del pueblo, de Barrancas.
‘Octavio’ y el ‘Negro’, conociendo de antemano el escándalo que propinaría secuestrar al papá de Luchito, decidieron encontrarle puntos vulnerables a la vida de ‘Mane’ para que su plan pudiera ser realizado rápido y sin que la comunidad pudiera identificarlos. Necesitaban un infiltrado, un topo, un hombre dispuesto a morder la mano de quien le daba de comer.
Acudieron entonces a Yerdinson Bolívar Bolívar, alias Arenca, un viejo conocido de la familia Díaz Marulanda, que en ese entonces se desempeñaba como uno de los entrenadores de la escuela de fútbol del jugador del Liverpool en Barrancas.
‘Arenca’, que hizo parte del encuentro en Guacanayal, aceptó sin remordimiento aparente dar detalles de la vida diaria de ‘Mane’ y Cilenis Marulanda, la madre del jugador. Allí se consumó la traición.
‘Arenca’, de acuerdo con la Fiscalía General de la Nación, junto con ‘Octavio’, recorrieron los puntos de interés que frecuentaba ‘Mane’, llegando incluso –junto a otro integrante del ELN– a vigilar la casa de la familia Díaz.
Además, según el ente acusador, hicieron un recorrido por la vía de Hatonuevo como posible movimiento de huida.
En este punto del plan criminal se unieron otros delincuentes como alias Marlon y Brayan, integrantes de Los Primos, a quien de manera anticipada le habrían pagado entre $300.000 y $1.000.000.
El secuestro se concretó el 28 de octubre. Alias Arenca llevó mediante engaños a ‘Mane’ Díaz y su esposa a un puesto de venta de patillas, en Barrancas, donde hombres armados los esperaban y se los llevaron en contra de su voluntad en la camioneta Kia Sportage de la familia Díaz.
“Cuando se llega al lugar de los hechos se estacionan delante de un portón, usted desciende del vehículo y, mientras eso sucede, dos motos con 4 personas llegan por la puerta trasera del vehículo. Uno de los asaltantes aborda al señor Luis Manuel.
Díaz, tomándolo del cuello, amenazándolo y lo ingresa a la parte trasera del vehículo”, explicó el fiscal del caso durante la audiencia de imputación de cargos. Cargo que fue aceptado por el procesado.
“Actualmente, Yerdinson Bolívar Bolívar permanece privado de la libertad como parte de una investigación a cargo de la Dirección Especializada contra las Organizaciones Criminales”, indicó el ente acusador.
Como es conocido, el ELN entregó el 9 de noviembre a ‘Mane’ Díaz a una comisión humanitaria de la Misión de la ONU en Colombia y de la Iglesia Católica en las estribaciones de la serranía de Perijá, cerca de Barrancas.
“A todos los hermanos del monte, a todos los grupos legalmente constituidos y no legalmente constituidos los llamo a la reflexión, a que dialoguemos, que hagamos un diálogo con los altos mandos de nuestro país para que Colombia, no en un año o en dos años, pero dentro de tres o cuatro años sea un país de paz”, pidió ‘Mane’ Díaz en medio de su propio drama.