Historias

“Muchas fotos, pero de ayuda nada”: familiares del bebé más grande de Colombia

En taxi expresó partió rumbo a Guacamayal, Zona Bananera fue trasladado el bebé de mayor peso de Colombia. “Recibimos con gozo a nuestro hijo, pero le debemos a todo el mundo”, dicen los papás.

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A Isaac David, el ‘superbebé’ que nació el sábado anterior en la Policlínica de Ciénaga le dieron de alta. Con una pijama blanca de muñequitos, envuelto en una cobija de color amarillo, rozagante y de los brazos de su abuela materna, Marta Urieles, salió de la sala de neonatos rumbo al barrio Las Flores, de Guacamayal, en la Zona Bananera, en donde lo esperaban sus padres Diana Machacón y Jhonatan Guerra.

La partida del centro asistencial (11:20 a.m.) causó sensación; todos querían cargarlo, acariciarlo y tomarle fotos. Médicos, enfermeras, auxiliares, vigilantes y usuarios de la clínica demoraron su salida, pues cuando unos se iban otros llegaban con el mismo interés.

De manera jocosa Yuranis, prima de la madre del niño y quien acompañó a Marta en su entrega, manifestaba: “Muchas fotografías pero de aquello nada”.

Se refería a la poca ayuda que los Guerra Machacón han recibido tras la noticia de la llegada al mundo del bebé de 6.38 kilogramos, el de mayor peso al momento de nacer en la historia del país, y el cual despertó el interés de los medios de comunicación nacionales.

Cuando se aprestaban a sacarlo del centro asistencial, tres mujeres descendieron de un automóvil con una bañera y dentro de esta, ropa (talla 12), teteros, chupos, toallas, almohaditas y baberos.

“¡Qué cipote de pela’o tan lindo!”, fue la expresión coincidente de Mariela Restrepo, Marta Castillo y Azucena Gómez, directivos de la fundación ‘Costurero Plenitud’, que llegaron desde Santa Marta para hacerle regalos a Isaac David.

“Nos enteramos porEL HERALDO y no dudamos en venir”, dijo Mariela, la presidenta de la fundación, quien dijo no ser tan amiga de las fotografías y las publicaciones, pues considera que estos son actos que debieran quedar ocultos y sin buscar nada a cambio, solo el detalle y la buena fe.

En un taxi expreso climatizado, cortesía de este medio de comunicación, Marta, Yuranis y el pequeño Isaac David, partieron faltando 10 minutos para las 12 meridiano hacia Guacamayal.

Diana Machacón, la madre, manifestó que recibe lleno de gozo el bebé, pero “debiéndole a todo el mundo”.

Y es que para sufragar los gastos del posparto y del ‘corre que corre’ antes del mismo, hubo que prestar dinero.