El matrimonio es uno de los momentos más especiales en la vida de quienes deciden unirse en el sagrado sacramento. Sin embargo, este puede ser un sueño siempre que el sentimiento sea correspondido, o una pesadilla si se trata de un cumplimiento por motivaciones que no se relacionan con el amor.
Por eso, en redes sociales sorprendió la manera en la que un hombre arribó con enojo a su ceremonia de boda. Desconcertado, el sacerdote que oficiaría la misa decidió hacer unas bromas para 'bajar la tensión' del ambiente.
Entonces, en vez de apaciguar las aguas, lo que hizo el sacerdote fue provocar el desahogo del prometido, quien aseguró que no deseaba contraer nupcias porque estaba siendo obligado.
“¿Estás obligado entonces? No, le pregunté a él, no le enseñes”, respondió el sacerdote mientras le decía a la prometida que lo dejara explicar su punto de vista.
El sacerdote también dijo que, si el hombre no bromeaba, lo mejor era no celebrar el matrimonio, pues este se trata de un acto voluntario de amor y de fe, pero minutos después decidió que la celebración continuara, pues pensó que se trataba de una broma del prometido, a quien en todo momento se le vio cabizbajo y nervioso.