¿Qué Pasa?

En accidente vial muere conductor de bus al quedar aprisionado en la cabina

El hecho dejó también seis personas heridas.

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Wilson Antonio Guerra Sánchez se despidió de su esposa Denis Matilde Torres Blanquicet convencido de que Junior jugaría la final de la Copa Sudamericana. Como amante del fútbol e hincha furibundo del club Tiburón, ese era su gran sueño y su tema recurrente en estos último días, recordó ayer la señora al dialogar con AL DÍA sobre los anhelos de su esposo. Guerra no podrá ser testigo de esta hipotética posibilidad, pues perdió la vida en un accidente vial ocurrido a las 7:20 de la noche del pasado martes.

De 55 años, el hombre conducía un bus afiliado a la empresa Unitransco que chocó contra una tractomula en la carretera de la Cordialidad, entre Molineros y Sabanalarga. “El bus cubría la ruta Maicao-Cartagena. La colisión se presentó con un tractocamión parqueado en la vía. Se está brindando el apoyo necesario a las autoridades para ayudar a esclarecer las circunstancias de este lamentable accidente”, explicó Unitransco.

El choque fue tan fuerte que Wilson Antonio Guerra Sánchez, natural de Montería, quedó aprisionado entre su silla y la carrocería delantera de su vehículo.

“Unitransco S.A. lamenta profundamente el accidente sucedido cerca del corregimiento de Molineros, en Sabanalarga (Atlántico), donde infortunadamente el conductor del bus 9255 perdió la vida y seis pasajeros resultaron lesionados”, explicó la firma transportadora.

“La compañía expresa sus sentidas condolencias a los familiares de Wilson Antonio, que desde el año 1999 tenía vínculos laborales con la empresa, en diferentes periodos de tiempo”, añadió también la oficina de comunicaciones de Unitransco. Wilson recibió auxilio médico, pero falleció al momento de ingresar a la Clínica Campbell de Sabanalarga. “Guerra Sánchez (…) infortunadamente no sobrevivió a los politraumatismos. Las seis personas que resultaron lesionadas fueron atendidas anoche (martes) en la Clínica San Vicente de Baranoa, y ya fueron dadas de alta”, añadió la empresa de transporte público.

Un salmo para despedirse

El bus 9255 salió en la mañana del martes de Maicao, inicio de la ruta (o línea) que terminaría en Cartagena durante la misma noche. Dicho recorrido tuvo una escala en Barranquilla, donde Wilson Guerra abordó el vehículo para iniciar su turno laboral.

“Ayer (martes) no desayunó en la casa, recuerdo que le preparé la comida, pero no se la comió porque tenía que hacer unas diligencias en su carro particular. Cuando volví, a eso de la 1:15 de la tarde, lo encontré en la casa, me dijo que llevaba tiempo ahí”, comentó Denis Matilde Torres, de 39 años, esposa del conductor.

“Pasamos hablando, como siempre, de muchas cosas. A las 5 de la tarde me dijo: ‘Mija, me voy’, entonces lo besé, le puse la oración de los que viajan de noche, que es el salmo 121, encendí la radio, en Radio Minuto (emisora cristiana) y lo vi salir”, expresó la viuda.

Denis continuó dialogando con AL DÍA sin derramar una sola lágrima, tranquila, incluso sonriente, pero no porque no le doliera, más bien por la tranquilidad de haber vivido con una gran hombre, como ella lo definió.

“Era lo más lindo que tenía en mi vida. Mi esposo era bello, un excelente hombre, gran padre, amoroso, amiguero, nada que reprocharle”, resaltó Denis.

Wilson, padre de cinco hijos, bromeó con una de sus niñas antes de salir de casa. Le dijo que no comiera tanto, después dejó a su espalda la puerta de la residencia situada en la carrera 13C No. 69A-04, barrio Nuevo Horizonte (Soledad).

“Salió tranquilo. Lo que podía tener en mente era la final (Copa Sudamericana) que podría jugar Junior (está en semifinales con Santa Fe). Decía todo el tiempo que si pasaban a pelear el título, como sea, se vería la final. Era juniorista de verdad”, añadió la señora.

Todo ese cariño que profesaba, el amor por su esposa e hijos, la pasión desbordada por el elenco Tiburón, cada una de esas cosas quedaron sepultadas tras una maniobra que aún es materia de investigación.

“A ciencia cierta no me dicen qué pasó. Cuentan que la mula lo cerró, pero no se sabe en sí cómo pasaron las cosas, estamos esperando que resuelvan eso”, finalizó Matilde.