Extradición de Merlano provoca lío diplomático

El Ministerio de Justicia de Colombia informó que pedirá al presidente interino de Venezuela, Juan Guaidó, reconocido por más de medio centenar de países, la extradición de la excongresista barranquillera, Aida Merlano, capturada en la tarde de este lunes en el país vecino.

A esto, Guaidó respondió que el “Gobierno legítimo de Venezuela” dará toda la colaboración posible para el proceso; sin embargo, el comisario Miguel Domínguez, jefe de la Fuerza de Acciones Especiales (Faes) –institución armada que realizó la captura–, dijo que “Colombia debe tramitar ante el gobierno de Maduro cualquier extradición”.

Declaración que más tarde fue reafirmada por el propio presidente chavista, quien se refirió a la captura de Merlano en una alocución en vivo por su cuenta de Twitter.

Con ello, se desata una incertidumbre diplomática a nivel internacional que pone los ojos sobre el estado de las relaciones entre ambos países para preguntarse: ¿Quién extraditará a Aida Merlano?

El debate

Sobre la detención de Aida Merlano, la ministra de Justicia de Colombia, Margarita Cabello Blanco, dijo en la mañana de este martes que el Gobierno colombiano todavía está a la espera de que Interpol Venezuela les informe y confirme de manera oficial y formal la captura de la exsenadora barranquillera.

Explicó que dicha oficialidad es necesaria para cumplir con el procedimiento que inició cuando la Corte Suprema de Justicia ordenó la captura de Merlano y solicitó la circular roja de interpol, a principios de diciembre del año pasado.

“Una vez capturada debe comunicarse al país requirente para que se hagan los procedimientos correspondientes de extradición, pero todo eso se puede hacer siempre y cuando tengamos formalmente la comunicación y la confirmación de la captura de Aida Merlano”, explicó la ministra, asegurando que al recibir esa comunicación oficial se le daría remisión a la Corte Suprema de Justicia.

Además, aseguró que el Gobierno colombiano conoció de la captura a través de una llamada directa a Interpol y que solicitaron a la seccional venezolana de esta entidad la confirmación oficial, la cual, según cree la ministra, no ha llegado por demoras en el trámite y papeleo de identificación y judicialización tras la captura.

Por otro lado, aseguró que en estos momentos no hay cooperación internacional entre Colombia y Venezuela, y tampoco relaciones diplomáticas con el gobierno de Nicolás Maduro, por lo que se regirán a la regulación legal colombiana frente a casos de extradición como el de Merlano.

“Los pasos dicen que cuando la Corte Suprema nos solicite que hagamos los trámites de extradición, como Ministerio de Justicia debemos hacer el papeleo administrativo y remitir a Cancillería para que solicite al Estado cooperante la extradición. Es ahí donde viene la pregunta”, dijo la ministra Cabello, asegurando que el procedimiento se debe hacer con el gobierno reconocido por Colombia que, en este caso, sería el de Juan Guaidó y no el de Nicolás Maduro.

“No ha sido fácil por todas estas consecuencias propias de nuestros países, pero nuestra idea e intención es que ella regrese y tengamos la posibilidad de seguir su juzgamiento conforme a las garantías que se le han entregado, porque las ha tenido todas”, resaltó.

En respuesta a las declaraciones de la ministra, el presidente interino de Venezuela, reconocido por más de 50 países, Juan Guaidó, se pronunció a través de un breve comunicado en Twitter, asegurando que los funcionarios venezolanos “están en la obligación de notificar oficialmente” al Gobierno de Colombia sobre la captura de Merlano.

Además, Guaidó solicitó a la Interpol “su contribución y mayor colaboración posible para la ejecución efectiva” de las medidas que sean solicitadas por Colombia.

El debate se puso aún más complejo cuando intervino el comisario Miguel Domínguez, jefe de la Faes en Venezuela, quien en su primera comunicación oficial a un medio colombiano dijo que la vía legal para seguir el proceso de extradición era a través del gobierno de Maduro.

La respuesta de Maduro

Al filo de las 7:30 de anoche, durante una alocución en vivo por su cuenta de Twitter, Nicolás Maduro habló de la captura de Merlano y la petición de extradición del gobierno colombiano a Guaidó.

“El jefe del Sebin está informándome de sus primeras declaraciones”, comentó Maduro, quien aprovechó la oportunidad para criticar al presidente Iván Duque. “Manda tu carta, Duque, a Guaidó. Comete otra imbecilidad, para ver a quién te manda Guaidó... Rectifique señor Duque, porque sé que es un obtuso”.

Asimismo, Maduro reveló que en Venezuela hay capturados “más de 30 solicitados con código azul y no tenemos a quien entregárselos en Colombia”. Recalcó que por ser países vecinos están obligados a tener relaciones políticas.

“Nosotros con Álvaro Uribe tuvimos 8 años de relación... Más de 100 capos les entregamos con Uribe, lo mismo con Santos”, indicó.

Advirtió además: “Pendientes de los resultados de estas investigaciones... Dicen que no quieren que se extradite a esta persona a Bogotá porque sabe todos los secretos del uribismo y de la clase política que gobierna en Colombia ahorita”.

Lo cierto es que las decisiones que tome cada gobierno, legítimo o no, serán decisivas para determinar el futuro de la exsenadora investigada por corrupción electoral y cuánto tiempo estará en Venezuela.

Jurídicamente en aprietos

Más allá del debate por la extradición no la tiene fácil la excongresista tras haberse dado a la fuga y haber sido recapturada, pues a la condena de 15 años por el escándalo de Casa Blanca se le podría sumar otro proceso por fuga de presos, cuya pena va de cuatro a 10 años de cárcel.

Al respecto, Alexander Andrade, investigador del Departamento de Derecho Penal del Externado y magíster en derecho penal, le explicó a EL HERALDO que la exparlamentaria conservadora “enfrenta en la actualidad una sentencia condenatoria, y deberá cumplir con lo que le queda de esa pena”, emitida en septiembre pasado por la Corte Suprema, por los delitos de concierto para delinquir agravado, corrupción al sufragante y tenencia ilegal de armas; mientras que por otro lado “afrontará un proceso penal relacionado con el delito de fuga de presos, que es un delito que oscila entre los cuatro y 10 años de prisión”.

Frente a cómo quedaría tasada entonces la condena en años de Merlano, el penalista señala que “eso nos ubica en el terreno de la acumulación de penas: ella tiene un proceso culminado y el otro a va a avanzar y una vez quede en firme su condena el juez hace una redosificación en la que qtoma en cuenta la pena más grave de los delitos en concurso, le hace un aumento a la pena más grave y queda un espacio de valoración importante por parte del juez”.

Acerca del eventual proceso que por los delitos posesión de identidad falsa e ingreso al territorio venezolano de forma ilegal, agregó que Venezuela podría iniciar un proceso penal “y si llegaran a condenarla podría decidirse si purga la condena en Venezuela y si se adelantan los trámites de extradición”.

“Si Venezuela dice que no la quiere extraditar, ella debería purgar su condena allá y al regresar a Colombia a purgar su otra condena”, aseguró.

Finalmente, ante un escenario de posible colaboración de Merlano con la justicia colombiana, Andrade precisó que “en el proceso por fuga de presos seria exótico pensar que se pudiesen aplicar beneficios; aunque si ella dijera por ejemplo que va a decir quiénes la ayudaron a fugarse, la Fiscalía tendría discrecionalidad”.

Abiertos a escucharla

El fiscal general de la Nación (e), Fabio Espitia, dijo este martes que “siempre existe la posibilidad de acercamientos con cualquier persona procesada o condenada", dijo Espitia a periodistas desde el búnker, refiriéndose a la posibilidad de que Merlano pudiese colaborar con la justicia, por ejemplo, en torno al escándalo de delitos electorales de Casa Blanca.

Explicó el fiscal interino que “de un lado debe cumplir la sentencia de la Corte Suprema y de otro lado la vincularemos a otro proceso por fuga de presos".

De hecho, el jefe del ente acusador advirtió que no se descarta la formulación de otros punibles contra la barranquillera: “Estamos estudiando la viabilidad de ampliar la imputación por otros delitos”.

Por su parte, el abogado de la excongresista Merlano, Bladimir Cuadro, dijo ayer que la familia decidió designarle un abogado para que la defienda en Venezuela, pero que, por lo pronto, la última palabra en cuanto al futuro de la barranquillera la tiene el vecino país.

También dijo que no se había comunicado con Merlano y que desconoce qué pasaría con los procesos en los que la detenida funge como testigo, como lo son los que se siguen contra Julio Gerlein y Arturo Char.

“Estaríamos a la expectativa de lo que las autoridades vayan definiendo en cada uno de esos casos pero no tengo información en particular sobre esos expedientes”, aseguró Cuadro.