La funcionaria de la Fiscalía Marta Álvarez Cabrales, de 42 años, y su hija (11), fueron encontradas muertas con un disparo cada una, en una de las habitaciones de la vivienda en la que residían en el sector los Cedros, en el corregimiento Los Garzones.
El hallazgo de la escena fue hecho a la 1 de la madrugada de ayer por el esposo de la mujer y padre de la menor. El corregimiento Los Garzones está ubicado a 10 minutos del perímetro urbano de Montería. El hombre había salido desde la noche del sábado a departir con amigos, dejando, después de dejar a su mujer y la menor viendo televisión en la alcoba matrimonial.
Las primeras versiones indican que Álvarez Cabrales habría disparado contra la menor y después a sí misma con la misma pistola de dotación de su marido, escolta de un investigador del CTI.
El coronel Carlos Rojas Pabón, comandante de la Policía Metropolitana de Montería, dijo que la indagación deberá establecer “con precisión” las circunstancias del hecho.
Rojas confirmó que las evidencias apuntan a que madre e hija fueron impactadas con el arma de dotación.
El escolta fue incluido en el acervo probatorio para ser interrogado, pero hasta ayer no se le había recibido declaración porque estaba en estado de embriaguez.
"Estamos a la espera que se le pase ese estado, en vista de que así no se le puede adelantar ninguna diligencia", advirtió el coronel.