‘¡Justicia, justicia!’, fue el grito en sepelio de Javier de Jesús

En el cementerio de la Isla del Rosario, en Puebloviejo (Magdalena), y en medio de gritos de “¡justicia, justicia, justicia!”, fue sepultado Javier de Jesús, el niño de 2 años, asesinado a cuchillo la noche del domingo por Luis David Sánchez, la expareja de su madre.

El cuerpo del pequeño fue velado la noche del lunes y hasta la tarde del martes, bajo una carpa colocada en la calle principal del barrio La Esperanza, del corregimiento de Palmira.

Desde allí, el lamento de Eva Retamozo retumbaba con eco infinito en el pueblo. “Mi amor dame fuerzas para poder soportar este dolor”, decía aferrada al féretro.

Al lado suyo, silente y con la mirada fija en el rostro de su hijo, Rubén Darío Hernández, suspiraba.

Estefany, la tía de Javier de Jesús - de cumpleaños ese día - alzaba los brazos al cielo, se recostaba sobre el pequeño cajón y sin dar aún crédito a lo sucedido, preguntaba: “¿porqué, porqué Dios mío”.

El sepelio

A las 4:30 de la tarde el cortejo fúnebre partió, encabezado por niños y adolescentes que portaban carteleras que mostraban leyendas y reflexiones de amor y esperanza, al igual que fotografías del menor, que se mezclaban entre flores blancas y globos del mismo color marcados con la palabra ‘justicia’.

“Vivirás eternamente en nuestros corazones”; Te extrañaremos por siempre”; “Buen viaje pequeño”, “el verdadero amor nunca tiene final, siempre te vamos a querer”, se leía en algunos de los mensajes.

No asistieron las autoridades departamentales, tampoco la primera autoridad del municipio. “El dolor es nuestro, solo nuestro, si no están aquí, no pasa nada”, comentó Jesús Díaz.

Por las destapadas y angostas calles de Palmira, el séquito seguía su marcha al tiempo que desde un parlante se escuchaba el himno de los niños, interpretado por José Luis Perales.

“Que canten los niños que viven en paz y aquellos que sufren dolor; que canten por esos que no cantarán porque han apagado su voz...”.

Luego de caminar por el pueblo, el cortejo llegó a la Troncal del Caribe y allí se sumó un grupo de mototaxistas que hacían sonar sus bocinas. El grito de “justicia, justicia, justicia”, era incesante.

La vía fue bloqueada por casi una hora, lapso que duró el recorrido entre Palmira y el camposanto de la Isla del Rosario, aproximadamente 2.5 kilómetros.

A las 5:45 pm el féretro ingresó a la bóveda y Javier de Jesús, cual ángel, voló al encuentro con Dios.

De regreso a Palmira se registró un hecho inesperado. Los concurrentes al sepelio destruyeron la rústica casa en donde Luis David Sánchez agredió a Eva Retamozo y se llevó a Javier de Jesús para darle muerte varios metros más adelante.

La vivienda había sido desocupada por sus moradores la misma noche del atroz crimen.

El concejal José María García, dijo que “ya es hora que se detenga tanta violencia contra los inocentes. Esto que estamos viviendo en Palmira debe ser el punto final para el inicio de una nueva vida”.

Igualmente pidió condena máxima para el asesino del pequeño Javier de Jesús y recalcó que, “es un monstruo y debe pagar”.

El personero de Puebloviejo, Jorge Pérez, dijo que este suceso llena de dolor a todo el pueblo y agregó que igualmente “nos avergüenza”.

Es una situación que repudiamos de manera categórica y que es una situación en la que hemos hecho llamados reiterados porque en Puebloviejo hace rato viene carcomiendo valores y principios y hemos hecho poco o nada para prevenir”.

Homicida a la cárcel

Mientras en Palmira se cumplían las exequias del niño Javier de Jesús y la comunidad reclamaba justicia y pena máxima para su victimario, un juez Penal Municipal con funciones de control de garantías en el municipio de Ciénaga cobijaba con medida de aseguramiento en centro carcelario a Luis David Sánchez.

El director seccional de Fiscalía en el Magdalena, Vicente Guzmán Herrera, explicó que a esta persona se le imputó el delito de homicidio agravado, cargo que el imputado no aceptó.

Por este delito Luis David Sánchez purgaría una pena superior a los 40 años.

Entre los elementos materiales probatorios presentados por el ente acusador se encuentran los testimonios de la comunidad, un video en el que se aprecia el momento en que asesinó al niño y varias entrevistas de barrio.

Luis Sánchez quedó a disposición de funcionarios del Inpec para su traslado a la Cárcel Rodrigo de Bastidas de la capital del Magdalena.