La Cárcel de El Bosque: cuando el delito se mueve tras las rejas

Un intento de alteración de reclusos en la Cárcel Distrital de Varones El Bosque a finales del mes anterior, situación en la que se evidenció un choque entre dos poderosos exmiembros de bandas criminales, prendió las alarmas de las autoridades frente al manejo de la seguridad del recinto.

En aquel momento, la Policía Metropolitana tuvo que intervenir con uniformados para apoyar a la vigilancia privada que custodia el lugar. También fue necesario el uso del helicóptero el ‘Ojo de Dios’, pues existió la alerta de un supuesto plan de fuga masivo.

La Cárcel Distrital de Varones es manejada por la Alcaldía de Barranquilla y está situada junto a la Penitenciaría —operada por el Inpec—, convirtiéndose ambas en el complejo carcelario del barrio El Bosque, en la localidad Suroccidente.

La Distrital, como es conocido el penal, fue diseñada para 226 presos y actualmente tiene 387, según registros de la propia Administración distrital.

Sin embargo, este ‘leve’ problema de hacinamiento no sería una de las “bombas de tiempo” de la cárcel, sino algunos de los internos que allí permanecen. De acuerdo con lo establecido por las autoridades judiciales, en ese lugar se encuentran al menos 10 presos de alta peligrosidad que, según su perfil, deberían estar aislados y en un recinto de máxima seguridad.

Se trata de individuos que han sido capturados por su participación en bandas criminales con injerencia en la ciudad y se han dedicado a extorsionar, a traficar droga y armas, así como a llegar al punto de descuartizar a quien se les interponga en su camino.

Estos mismos individuos estarían delinquiendo desde el interior de la Distrital, ordenando homicidios, administrando expendios de droga en barrios del Suroriente y Soledad, además de extorsionar a comerciantes, estas dos últimas conductas realizadas a través de llamadas de celular.

Es tanto el poder de estos presos que, de acuerdo con la información de la Policía, hoy dominan los espacios de la cárcel hasta el punto que pueden requisar a los guardas de seguridad que vigilan por turno.

Los nombres

La información que manejan las autoridades es que uno de los hombres que estaría detrás del manejo interno de la cárcel distrital es Franklin Javier González Luna, alias Franklin Malembe, Mateo o El Viejo.

González Luna fue miembro del frente José Pablo Díaz de las AUC y se desmovilizó en 2006. Después de su desmovilización integró las filas de ‘Los Rastrojos’ y luego ordenaría como líder de ‘Los Papalópez’, una banda que llegó tener poder en Barranquilla en los barrios San Roque, Rebolo, La Luz, La Chinita y El Ferry. Y en Soledad, en Pasadena, Primero de Mayo, Las Ferias y Las Placas, entre otros.

Su captura se produjo el 23 de marzo de 2017 y desde esa fecha se encuentra recluido en la Cárcel Distrital de Barranquilla.

Junto a ‘Malembe’ está otro de los líderes de ‘Los Papalópez’ llamado Habib Gutiérrez Silvera. Este es conocido con el alias de Happy y llegó al penal por el asesinato de Ulises Rafael Julio Ibarra, ocurrido el pasado 28 de enero de 2017.

El 25 de septiembre de 2018, el Juzgado Noveno Penal del Circuito de Barranquilla con funciones de conocimiento declaró culpable y condenó a 212 meses de prisión a Gutiérrez Silvera. Este llegó a un principio de oportunidad con la Fiscalía, luego de aceptar su responsabilidad en el crimen ocurrido en la calle 53C con carrera 24, en el barrio San Isidro.

En la resolución del despacho se dejó constancia de que el condenado no tenía “derecho a solicitar una suspensión condicional de la ejecución de la pena, ni a una solicitud de prisión domiciliaria” y por eso fue enviado a la Distrital.

Según las autoridades, ‘Happy’ fue el responsable de la expansión del grupo delincuencial nacido en La Chinita con incursiones en los barrios La Central y Primero de Mayo.

El tercero de los diez es Leonardo Fabio Rincón Yepez, conocido como ‘Hippie’, quien según las pesquisas de detectives de la Dijín fue miembro de las Autodefensas Unidas de Colombia y tuvo bajo su mando las actividades delictivas en Juan Mina, Juan de Acosta, Tubará, Puerto Colombia, entre otros municipios del Atlántico.

Además de eso, ‘Hippie’ o ‘La Monita’ fue identificado en medio de las investigaciones como el terror de barrios como Villa Severa, El Parque, Los Laures, Bellarena, Galán, Universal, Villa Muvdi y Villa del Carmen, entre otros, donde venía extorsionando a los comerciantes y residentes de esos sectores.

‘Hippie’ fue detenido en su momento con David Hernández Menco, Jaime Francisco Mercado Londoño, conocido como ‘Morro’; Jonathan Enrique Pacheco Hereira, alias Patacón; Yosimar Manuel Ortega Garizábalo; Iván Darío Orozco Cabrera y Brandon Blanquiceth, alias Chuky.

El ‘Combo de Hippie’, como identificaron a Leonardo Fabio Rincón y a sus cómplices, fueron enviados a la Cárcel Distrital por el Juez 13 Penal Municipal de Barranquilla el pasado mes de mayo.

El último de la lista es Yesid Adolfo Solano Oviedo, un expolicía vinculado a robos en sedes de Banco Agrario del Atlántico y Magdalena. En las investigaciones de las autoridades se tiene información de que su banda también está conformada por miembros activos de la institución armada.

Solano Oviedo tiene el alias de Bebé y permanece en la Distrital por los delitos de hurto calificado y agravado, así como fabricación, tráfico y porte de armas de fuego.

Delitos de bajo impacto

esde la Alcaldía Distrital, voceros señalaron el viernes anterior que frente al actual panorama de la Cárcel Distrital se han hecho “múltiples solicitudes al Inpec (Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario)” en los comités carcelarios. Reiteraron que a la Distrital siguen enviando desde los juzgados presos de “alta peligrosidad”, cuando la prisión está diseñada para delitos de “bajo impacto”.

Funcionarios indicaron que, por lo pronto, con la ayuda de la Policía se realizarán más allanamientos para decomisar elementos ilegales como televisores, celulares y droga. Eso basado además en los incrementos de denuncias de la comunidad por las extorsiones que se han incrementado en la ciudad y los asesinatos ordenados desde la cárcel.

Precisamente, en agosto de este año, la institución reportó, tras allanamientos en el penal, la incautación de 38 dispositivos celulares, 27 armas cortopunzantes, 38 sim cards, 12 micro SD, 280 gramos de marihuana, 344 gramos de base de coca y la incautación de 175 mil pesos en efectivo.

En su momento, la Policía precisó que toda la información recopilada en los celulares sería agregada a la investigación que se lleva contra líderes de bandas criminales internados allí, en especial los pertenecientes a la banda ‘Los Costeños’ y ‘Los Papalópez’.

Caso reciente

El jueves anterior, un guardia de la Cárcel Distrital fue sorprendido por sus propios compañeros tratando de ingresar al recinto del barrio El Bosque con cinco kilos de droga en un unos portacomidas.

AL DÍA conoció que hacia las 5:45 de la tarde de ese día llegó al establecimiento de reclusión de mínima seguridad el guardia Uziel Enrique Guillén Paternina para recibir turno de guarda.

Sin embargo, el uniformado fue requerido por los comandantes de guardia, entrante y saliente, para realizarle una requisa, debido a que el perro antinarcóticos lo había ‘marcado’, es decir olfateó droga en el bolso que llevaba.

Al realizarle el procedimiento, los comandantes de guardia le hallaron en el interior de tres portacomidas marihuana y base de coca.

Luego de haber sido sorprendido con la droga en su poder, el guardia Uziel Enrique Guillén Paternina les dijo a los comandantes de vigilancia que fue amenazado de muerte.

“Me llamaron y me dijeron que afuera de la casa había una camioneta, que reciba lo que me iban a entregar o si no me mataban a mí y a mi hijo; que ya sabían dónde vivíamos. Me dijeron que la droga venía a nombre del Viejo”, relató el guardia.

Casualmente, ‘El Viejo’ es un alias de los presos que aparecen en la lista de la Distrital. Esa información que dio el guardián es investigada por Fiscalía.

Protestas internas

En marzo de este año, la muerte por meningitis, derivada de una otitis, del interno Jefferson Hernando Macchi Bujato, de 22 años, provocó la protesta de los otros reclusos que reclamaron “mejores condiciones médicas por parte del centro carcelario”.

En aquel momento, el personero Distrital Jaime Sanjuán anunció una investigación para verificar si se cometieron irregularidades en el caso del preso muerto.