Un hombre que tenía a su propia comunidad en zozobra en un barrio de la periferia, fue capturado por la Policía Nacional quien le incautó un arma de fuego con la cual estuvo haciendo disparos al aire para causar pánico en el barrio y adueñarse del temor de sus vecinos.
El procedimiento se hizo en la carrera 25 con calle 40, una invasión a terrenos particulares que se conoce como Invasión Wilder. Allí fue capturado cuando corría a esconderse de los uniformados, Carlos Rafael Pérez Moreno, 26 años, quien ahora enfrenta un proceso penal por el delito de porte ilegal de arma de fuego.
El arma que portaba Carlos Rafael es una escopeta calibre 16 recortada, de fabricación artesanal, la cual estaba acompañada por dos cartuchos, uno ya estaba inutilizado por haber hecho un disparo.