El llanto de un bebé que nació ayer en horas de la mañana dentro de un carro en la vía que comunica a los municipios de San Marcos y Majagual, era la muestra más fiel que el don de la vida había hecho de las suyas en las carreteras del departamento de Sucre.
La mujer no alcanzó a llegar al hospital, donde pretendía dar a luz, pues las condiciones climáticas le impidieron salir de su vivienda en la vereda San José, zona rural de Sucre-Sucre y cumplir con su cita. Además, las contracciones no le dieron espera. Por ello, la joven, de 18 años, se vio obligada a conocer a su hijo en medio de la naturaleza y rodeada de otras personas que no eran sus médicos.
Toda una odisea
Una llamada que recibió la patrulla del cuadrante que ronda por esa zona, junto a la Policía de Infancia y Adolescencia y de Tránsito y Transporte, atendió el caso, pues fueron los encargados de trasladar al personal médico hasta el kilómetro 3 de dicha vía debido a que en el ente asistencial no había ambulancia.
La madre después del trabajo de parto tuvo que ser trasladada hasta una clínica de segundo nivel para recibir la atención requerida al igual que su pequeño bebé.
El tráfico por ese punto se ralentizó por este acontecimientos que no es común y del que todos querían ser testigos. Tanto la madre como el bebé están bien de salud.
