Mientras las comunidades de los corregimientos San José de Oriente y Betania, en el municipio de La Paz, al norte del Cesar, siguen padeciendo por falta de agua potable y alcantarillado, un moderno sistema de tratamiento con redes que construyó el gobierno departamental hace cerca de tres años por un valor superior a los $4.500 millones permanece sin funcionar, primero por la renuencia de la administración municipal de recibir las obras y luego por la falta de un operador.
La empresa Aguas del Cesar, encargada de ejecutar los proyectos de saneamiento básico en este departamento, informó que en octubre de 2016 dio por terminado los trabajos del contrato No 100 de 2011 que incluye la planta de tratamiento de aguas residuales, y en noviembre del mismo año envió a la administración municipal de La Paz el oficio No. 100 -0810 solicitando el recibo de la obra, manifestando que la política de los planes departamentales de agua está orientada a apoyar las gestiones, responsabilidades y decisiones de los municipios en el compromiso de la prestación eficiente de los servicios públicos domiciliarios de acueducto, alcantarillado y aseo, en cada una de sus jurisdicciones.
“Además se le ofreció asesoría en cuanto a las diferentes alternativas que el municipio podía tener para garantizar una efectiva operación de los sistemas entregados por Aguas del Cesar S.A. E.S.P., sin embargo el municipio de La Paz no recibió la obra”, indicó la empresa.
El gerente de Aguas del Cesar, Pedro Serrano, indicó que “se trata de un proyecto de optimización de acueducto y alcantarillado, que incluye además de la planta de tratamiento de aguas residuales, una planta de agua potable, dos unidades más e instalación de redes, que no se encuentra en condiciones óptimas debido al paso del tiempo y que fue objeto de vandalismo, donde rompieron unas tuberías y extrajeron unos equipos, estas plantas eran auto sostenibles con energía hidráulicas, y al momento de los actos vandálicos se colocó en riesgo el tratamiento de las aguas residuales que hoy están desbordadas”.
Señaló que el Municipio tenía la obligación de recibir las obras y asumir la operación del sistema, pero no ha sido posible a pesar de los reiterados oficios que se le han dirigido y de la socialización del proyecto tanto con las comunidades, como con la empresa de servicios públicos y la administración local.
Reiteró que las obras en estos corregimientos funcionaban; sin embargo, debido a la operación inadecuada, se presentaron los inconvenientes antes descritos; incluso se asumió el compromiso de nuevamente trasladar personal técnico de Aguas del Cesar para brindar capacitaciones y poner en adecuado funcionamiento los diferentes componentes del proyecto en mención, así como también evaluar el posible deterioro de las plantas ocasionado por la falta de operación y mantenimiento.
Dichas acciones quedaron sujetas al cumplimiento de un compromiso escrito y claro por parte del Municipio de recibir las obras, sin embargo persistió la renuencia por parte de la Alcaldía de La Paz al recibo.
AL DÍA intentó comunicarse con la alcaldesa de La Paz, Andrea Ovalle, para conocer su posición al respecto, pero no contestó las llamadas.