Muere estudiante de medicina que había resultado herido tras ataque a bala

• Jesús Pomárico Osorio, estudiante de medicina, falleció en la Clínica del Prado en Santa Marta tras ser herido en un ataque sicarial en Ciénaga, Magdalena.
• El joven se encontraba en el lugar equivocado cuando ocurrió el ataque dirigido contra otra persona, resultando gravemente herido junto a otro individuo fallecido en el mismo incidente.
• A pesar de los esfuerzos médicos, Pomárico Osorio no logró sobrevivir, dejando consternada a la comunidad universitaria y a sus allegados.

El trágico desenlace de un joven estudiante de medicina ha sacudido las calles de Santa Marta, cuando Jesús Pomárico Osorio, de tan solo 24 años, falleció en la Clínica del Prado el pasado sábado.

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Su muerte se remonta a un fatídico ataque sicarial perpetrado el 10 de febrero en el barrio Manzanares de Ciénaga, Magdalena.

Según relatos de allegados, Pomárico Osorio se hallaba en el lugar equivocado en el momento del violento asalto, dirigido originalmente contra otro individuo. La violencia desatada por los sicarios, que abrieron fuego desde una motocicleta, no solo cobró la vida de Rubén Darío Egea Muñoz, sino que también dejó herido de gravedad al estudiante universitario.

Inmediatamente tras el atentado, Jesús fue trasladado de urgencia a Santa Marta, donde fue sometido a una delicada cirugía en un intento por salvar su vida. Sin embargo, su estado de salud permanecía incierto, sumido en la incertidumbre de un pronóstico reservado que mantenía en vilo a sus seres queridos y a la comunidad universitaria.

Además de su dedicación a los estudios de medicina en la Universidad del Magdalena, se conoció que Pomárico Osorio cultivaba una pasión por la música, una faceta más de su personalidad que ahora permanece como un recuerdo vivo entre quienes lo conocieron.

El triste desenlace de este joven prometedor ha dejado una profunda huella en la comunidad, que este viernes se reunió en su hogar para elevar plegarias por su pronta recuperación. Sin embargo, la noticia de su fallecimiento en horas tempranas del día siguiente sumió a todos en un profundo pesar, recordando la fragilidad de la vida y la crudeza de la violencia que azota a la región.