¿Qué se sabe de la extraña muerte de un niño de seis años en Soledad?
Versiones conocidas por AL DÍA aseguraron que el pequeño era víctima de maltratos físicos y verbales por cuenta del padrastro y también de su progenitora, quien halló el cuerpo a la 1:40 de la madrugada de este domingo.
Investigadores de la Unidad de Infancia y Adolescencia de la Policía Metropolitana de Barranquilla indagan ante el caso.
Lo que se sabe es que el menor fue trasladado por su progenitora hasta un centro médico a eso de la 1:30 de la madrugada.
El cuerpo del pequeño presentaba varios hematomas.
Si tienes un poco más de tiempo:
Investigadores de la Unidad de Infancia y Adolescencia de la Policía Metropolitana de Barranquilla indagan sobre la muerte de un menor identificado como Samuel Eduardo Cárcamo Suorio, de tan solo seis años de edad, confirmada en la madrugada de este domingo en el Camino Ciudadela 20 de Julio, en la localidad Metropolitana.
Lo que se sabe es que el menor fue trasladado por su progenitora hasta el centro médico, a eso de la 1:30 de la madrugada, pero a su ingreso por urgencias médicos señalaron que el pequeño había llegado “sin signos vitales”.
Hematomas en diferentes partes del cuerpo
El niño presentaba una lesión en la nariz, una aparente mordedura en la lengua y hematomas en diferentes partes del cuerpo, por lo que el cuerpo médico del centro asistencial no certificó su deceso y, por el contrario, alertó a las autoridades sobre el particular.
“Al realizarle la valoración le encontraron lesiones, al parecer hematomas ocasionados por terceros”, detalló una fuente policial.
En la intervención de los agentes, peritos de la Sijín adelantaron la diligencia de levantamiento y trasladaron el cuerpo del pequeño hasta el Instituto de Medicina Legal para que un médico legista verifique la verdadera causa de muerte.
Vivía en El Manantial y antes residió en Las Cayenas
Trascendió que el niño residía con su familia en el barrio El Manantial de Soledad y, al parecer, en la noche del sábado este había quedado bajo el cuidado de su padre.
Esa fue la versión que entregó la progenitora a las autoridades y a médicos que permanecían en turno en el centro de la red hospitalaria del Distrito.