Un nuevo semblante protagoniza la vida de Shakira. El desgarre de un corazón roto ha quedado en su denominado año sísmico 2022. Miami le sonríe, le está alumbrando el anhelado sol con el que hoy está brillando en compañía de sus hijos, el motor que la hizo ir en búsqueda de la felicidad.
Ese amor maternal quedó plasmado en el lanzamiento de su nuevo sencillo Acróstico, una balada dedicada a sus pequeños, en donde le puso pausa a los ritmos urbanos en los que había navegado en los últimos meses, acercándose al concepto musical de su álbum El Dorado publicado en 2017.
Además, desde 2021 la barranquillera no lanzaba una canción en solitario a través de Don't Wait Up, ya que, el éxito musical del año anterior lo compartió con artistas como Rauw Alejandro y Ozuna, mientras que en el presente causó todo un fenómeno mundial con Bizarrap y su BZRP Music Session #23. Posterior a ello colaboró por primera vez con Karol G en TQG.
Conmovedoras letras le dieron vida a su acróstico, palabra que hace referencia a una composición poética y en el que convierte la lírica en su mayor expresión de amor como madre. Fue Milan el primero en otorgarle ese título con su nacimiento el 22 de enero de 2013.
Gracias al pequeño de 10 años, Shakira lanzó en el 2014 la canción The One Thing, escrita para su primogénito, haciendo alusión a un mundo voluble, en el que Milan convirtió la oscuridad en la luz del sol. Dos años después, un 29 de enero nació Sasha, y desde entonces, los dos han caminado agarrados de su mano.
Desde el pasado 2 de abril, la artista le puso fin a más de una década residiendo en Barcelona. Con quienes ha considerado su refugio, se marchó a Miami para escribir una nueva historia en el libro de su vida. Ellos son el motivo de este nuevo tema, quienes se ven reflejados en una portada en la que se observan dos pájaros pequeños saliendo de su nido y preparándose para volar, mientras otro más grande los observa detenidamente.
Además, su ilustración ha dado lugar a que sus fanáticos recuerden aquella portada de la canción ‘Me enamoré’, dedicada a su expareja. Allí, la intérprete está trepada en un árbol, el mismo que allí se refleja, sustituyendo su imagen por la de dos pajaritos, que serían sus hijos. Mientras un amor terminó, el de madre representa un sentimiento imposible de quebrantar.
“Pero las cosas no siempre son como las soñamos, a veces corremos, pero no llegamos. Nunca dudes de que aquí voy a estar”, este pequeño fragmento de la canción no es sorpresivo para algunos, pues, el día que decidió dejar suelo español publicó una historia en el avión con esta misma frase, lo que causó una expectativa que hasta hoy se pudo resolver.
Con el lanzamiento de TQG en compañía de Karol G, Shak decidió cerrar el amargo capítulo que vivió tras su separación con el español Gerard Piqué. Está lista para el próximo round que le tiene la vida, junto a ellos, recordándose a sí misma que necesita ser un ejemplo como mamá.