¡Viagra femenino para la falta de apetito sexual!

La falta de interés sexual es un problema que muchas mujeres enfrentan en algún momento de su vida, pero la medicina ha dado grandes pasos para contrarrestar esta situación poco deseada y al respecto una lectora nos escribió lo siguiente: “Querido Don Juan, desde hace varios meses he notado una disminución en mis ganas de tener relaciones sexuales y conversando con una amigas, me dijeron que al parecer existen medicamentos como el Viagra pero para las mujeres, por lo que me gustaría enterarme más al respecto”.

Efectivamente, esta ‘mágica’ medicina existe. A partir del mes de septiembre estará disponible un tratamiento para las mujeres que sufren pérdida del deseo sexual. Se trata de una inyección que debe ser administrada al menos 45 minutos antes de la actividad sexual.

La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA por sus siglas en ingles), revisó y aprobó el medicamento, que tal como la lectora lo sugiere, es conocido como el Viagra para las mujeres.

Su nombre es Vyleesi, o bremelanotida, su función es revivir el libido y una vez en el cuerpo, acelera la actividad de las hormonas melanocortinas, las cuales están asociadas con el apetito sexual.

La inyección está diseñada para mujeres que han perdido el deseo sexual después de la menopausia, o para aquellas que sufren de hipoactividad sexual, un trastorno poco común en mujeres y hombres que se presenta en edades menores a los cincuenta años.

La FDA aclaró que el medicamento “no debe utilizarse en pacientes con presión arterial alta que no está controlada, o en pacientes con enfermedad cardiovascular conocida”.

Otra de las contradicciones del Viagra femenino, según la agencia estadounidense, es que: “El 40% de las personas que participaron en el ensayo clínico experimentaron náuseas y el 13% necesitó medicamentos para el tratamiento de esas náuseas”.

Es probable que las mujeres que usen la inyección puedan tener los segundos efectos identificados por FDA.

El Viagra femenino no está a la venta en Estados Unidos y aún no se sabe con exactitud las indicaciones para su comercialización, es decir, su precio y demás.

Aún faltan pruebas para validar el medicamento, porque según científicas y colectivos feministas, dudan de su efectividad, no solo por sus contraindicaciones, sino que al hablar de la hipoactividad sexual no se puede decir con certeza si se trata de una enfermedad.

Sin embargo, este medicamento podría ayudar a esas mujeres que quieren disfrutar de su sexualidad y no pueden.