¿‘El estafador de Tinder’ le tumbó $18 millones a un odontólogo en Barranquilla?
Simon Leviev, según el denunciante, se presentó en un consultorio odontológico ubicado en el norte de la ciudad como un acaudalado comerciante de diamantes.
Cuando el documental de Netflix The Tinder Swindler (El Estafador de Tinder), estrenado el pasado miércoles 2 de febrero, se popularizó, empleados de una clínica odontológica ubicada en el norte de Barranquilla reconocieron de inmediato a Simon Leviev, luego de ser atendido hace varios años en su consultorio.
Este miércoles se conoció que el llamado "estafador de Tinder" estuvo, al parecer, en la ciudad en el 2017, y habría estafado a la clínica Alianza Odontológica.
Según reveló Sergio Tinoco, propietario de este prestigioso consultorio, Simon Leviev se realizó un costoso diseño de sonrisa. Quería hacerse un cambio de carillas en todos los dientes, un procedimiento que tenía un valor de 18 millones de pesos.
Al parecer, a Leviev le llamó la atención esta empresa por su reconocimiento internacional en el área de la salud dental.
De acuedo con la versión de Tinoco, el 'estafador' llegó a su consultorio en limusina, con escolta y en compañía de otro hombre, a quien presentó como un familiar de él.
Según quería que el médico usara el mayor avance tecnológico que tuviera para el tratamiento de sus dientes y que se debía realizar el procedimiento en un tiempo limitado porque solo estaría en Colombia durante 48 horas. Por ello, el médico a cargo del procedimiento trabajó hasta altas horas de la noche para cumplir con el horario estricto de Leviev.
“Se presentó como un acaudalado comerciante de diamantes, no se nos hizo extraño que llegue un paciente extranjero a la clínica, porque Colombia es un destino para muchos países en el tema de salud. Nos ofreció pagar el tratamiento con la modalidad de Apple Pay, que aún no estaba implementado en esa época en Colombia y se fue sin pagar, señalando que al día siguiente llegaría el pago por parte de sus ayudantes”, aseguró el médico.
“Nunca nos había pasado este tipo de casos y menos con pacientes extranjeros. Él manifestó su intención de pagar y a nosotros no se nos hizo para nada sospechoso. No le pasó la tarjeta de crédito, pero eso es algo que ya les ha pasado a otros pacientes y realmente actuamos con la confianza como lo hacemos con todos”, agregó.
