La historia de Isabella Pieri es una de esas que vale la pena leer. Ella tiene nueve años, su mamá murió y a raíz de eso, su papá decidió cortarle el cabello para que no tener que peinarlo. Sin embargo, en la vida de esta niña apareció Tracy, la conductora del bus de su colegio en Estados Unidos.
El cabello de la pequeña creció y ella aprendió a hacerse los peinados porque a su papá le tocaba madrugar para ir a trabajar en un sitio lejano. Pero todo cambió hasta que un día Tracy la peinó luego de la niña le pidiera el favor. Desde entonces no hay un día que esta mujer arregle a Isabella, según relató de Huffington Post.
Tracy contó a Time que desde hace siete años sufre de cáncer de mama y cada vez que ve a Isabella siempre piensa en sus hijos y quién se ocupará de ellos cuando ella no esté. "No es que mi marido no pueda hacerlo, pero ya sabes, eso es lo que suelen hacer las mamás", agregó la mujer.
Por este pequeño detalle, Isabella dice que aprecia mucho a Tracy y que incluso la considera como una mamá. De hecho, hasta los mismos profesores han notado una diferencia en el comportamiento de la niña desde que la mujer le dedica tiempo para peinarla.