Aunque "lo unico que se necesita para morir es estar vivo", como recita un popular refrán, hay formas de fallecer bastante absurdas y dificiles de comprender para cualquiera.
Una de estas fue la causante de la muerte de un hombre de 30 años, quien fue impactado por una bala disparada por su propio perro, luego de que este accionara un arma de forma involuntaria.
Según trascendió, el hombre iba manejando su camioneta, dejó a su perro y escopeta en la parte trasera de vehícuo mientras se dirigía a casa, pero en un punto del camino recibió un impacto de bala en la espalda.
La Policía de Kansas, Estados Unidos, lugar de los hechos, determinó que el disparo se ocasionó cerca de las 9:40 de la noche luego que el canino intentara caminar al interior del vehiculo y pisara el arma, accionándola e hiriendo casi que a quemarropa a la víctima.
Como pudo, el herido se dirigió a un centro asistecial cercano en el que necesitó de reanimación pulmonar, sin embargo, los galenos no pudieron mantenerlo con vida.