¿Qué Pasa?

El nombre de ‘Ñeñe’ Hernández y Beto Zabaleta en el caso GQ

Fiscalía participación de ‘Ñeñe’ Hernández y Beto Zabaleta ene l crimen de Oscar Rodríguez Pomar.

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La reciente muerte del ganadero valduparense José Guillermo ‘Ñeñe’ Hernández Aponte, en medio de un atraco en el barrio Sao Benedito de la ciudad de Uberaba, en Brasil, sacó a la luz una investigación en su contra que adelanta la Fiscalía en Bogotá para establecer los autores materiales e intelectuales de la muerte de Oscar Eduardo Rodríguez Pomar.

La Unidad Bacrim de la Fiscalía además de investigar a Diego Acuña Carvajalino; Javier Enrique Mosquera Munive, alias el Coby, y Ernestina Escorcia Hernández, alias la Manca como autores materiales de la muerte de Rodríguez Pomar, busca establecer si Hernández Aponte, fallecido en Brasil; el cantante de música vallenata Alberto ‘Beto’ Zabaleta; el ex alcalde de Tenerife, Magdalena, Omar Vanegas Lora, y el comerciante de Maicao Alberto López Atencio habrían encargado a ‘Marquitos Figueroa’ la muerte de Carlos Rodríguez Gómez pero que, por una equivocación, terminaron asesinando a su hijo, Oscar Rodríguez Pomar.

El crimen

El 18 de agosto 2011 el joven de 28 años se disponía a regresar a su casa en el carro que era propiedad de su papá, Carlos Rodríguez Gómez, dueño de la desaparecida Boutique y Sastrería GQ.

Las oficinas de GQ estaban ubicadas en la calle 72 con carrera 48, en el norte de Barranquilla; fue en las afueras del negocio donde un parrillero en una moto se le acercó al joven y lo mató.

En un interrogatorio adelantado por la Dijín a Carlos Rodríguez Gómez días después de la muerte de su hijo Oscar Eduardo explica que hay circunstancias que lo ponen a pensar de dónde puede venir la orden de atentar contra su vida, entre esas que era prestamista.

“Hay personas que se conocen entre ellos y que casualmente estas personas me debían a mí, son personas oriundas del Cesar y La Guajira, sus nombres son José Hernández alias el Ñeñe, Alberto López y el señor Alberto ‘Beto’ Zabaleta. También me pone a pensar otro señor de aquí de Barranquilla, el señor Omar Vanegas alias Roco, este último en una reunión con un socio mío, dijo que había personas en Valledupar que querían contratar un sicario para que me mataran, y que él le había dado a la persona que le informó eso un dinero para que no me hiciera daño”, explicó el dueño de la sastrería GQ.

La advertencia de Kiko Gómez

“Tengo que recalcar que el señor ‘Kiko’ Gómez (Juan Francisco Gómez Cerchar), persona que conozco desde el año 1982, este señor un mes antes de la ejecución de mi hijo me llamó un día en la noche para decirme -¿Carlos que problemas tienes con personas de deudas que te tienen?- y yo le contesté –tengo problemas con ‘El Ñeñe’ Hernández, Alberto López. Omar Vanegas alias Roco y Alberto Zabaleta, que tenemos dificultades en la oficina por los pagos, y él contestó -¿Por qué no tratas de arreglar esto, tú sabes cómo son estos indios que te pueden hacer daño?, me dijo el hombre antes de la muerte de mi hijo”, sostuvo Rodríguez Gómez al Policía Judicial.

En la entrevista, Rodríguez Gómez explicó que hizo sus propias averiguaciones. “Después de la muerte de mi hijo, me llegaban tantas informaciones y me llamó la atención una en la cual me hablaban de un señor que lo apodaban ‘La Perra’, me tomé la tarea de investigarlo y el señor se llama Yesid Alfonso Martínez, tengo entendido que es de origen guajiro y que era la mano derecha de ‘Marquitos Figueroa’ y que aquí en Barranquilla se movía con las autoridades para cometer asesinatos por encargo y que era protegido por personas muy poderosas económicamente en la costa, después me enteré por fuentes que yo tengo, que a él lo habían matado en Venezuela y que había sido enterrado en Colombia, esto lo digo porque la fuente me informó que La Perra tenía que ver con la contratación de mi muerte y equivocadamente mataron fue a mi hijo”, manifestó el hombre.

‘Mi palabra vale más que cualquier cosa’: Ñeñe Hernández

AL DÍA pudo conocer que el fallecido José Guillermo ‘Ñeñe’ Hernández Aponte rindió en calidad de indiciado un interrogatorio ante miembros de la Dijín el 19 de noviembre de 2014.

“El día de la muerte de Oscar Eduardo, yo estaba en la finca que se llama El Suán, queda en Valledupar en el sector de Los Venados, en Guaimaral, municipio de Valledupar, estuve haciendo labores cotidianas en la finca”, comenzó diciendo El Ñeñe Hernández acerca de donde se encontraba el día del crimen.

Sobre si conocía al sastre Carlos Rodríguez, este explicó “Sí, claro que lo conocía hace mucho rato en Barranquilla porque él tenía una sastrería y yo era muy gordo, no conseguía ropa y me tocaba mandar a hacer la ropa, ahí nos hicimos muy amigos con él y con su señora, luego tuve un negocio con él de un ganado en participación que él me dio, se liquidaron con conformidad de todos y por ahí viene la amistad de nosotros, somos amigos desde el año 1988 más o menos, no tuvimos ningún otro tipo de negocios con el señor Rodríguez, él nunca me prestó dinero a mí, nunca lo hizo, pero Carlos Rodríguez Gómez si le prestó dinero a un amigo mío empresario venezolano, creo que le prestó $700 millones, yo los presenté en una parranda vallenata y ellos arreglaron el préstamo en Venezuela”, dijo el hoy fallecido en tierras brasileñas.

“Al transcurrir los días me entero que Carlos se fue preso a los Estados Unidos por narcotráfico, yo creo que por una o dos ocasiones acompañé a mi amigo a donde la esposa de Rodríguez Gómez que era la encargada de recibir el dinero del prestamo, pero yo en ningún momento fui ni avalé el préstamo, porque si yo hubiera dicho que yo respondía por esa deuda, mi palabra vale más que cualquier cosa” dijo en ese entonces Hernández Aponte al investigador judicial y agrega que en una ocasión sufrió un cobro de una deuda por parte de la banda de ‘Los Rastrojos’, “Yo escuche comentarios callejeros que un tal ‘Roco’ era el que había matado al muchacho, pero esos eran comentarios de la calle, Carlos Rodríguez me dijo que a él le habían dicho que yo había matado a su hijo pero después me dijo que no tenía nada que ver con su muerte”.

Tras las declaraciones del sastre Rodríguez Gómez se emitió un oficio de orden de interrogatorio al artista Beto Zabaleta donde señalaba “No desestima el señor Carlos Rodríguez, que en efecto, el artista ‘Beto’ Zabaleta haya recurrido a la organización criminal liderada por Marquitos Figueroa para atentar contra su vida y este despacho fiscal advierte que es un vector que debe ser examinado a profundidad, dado el contexto en el que se ejecutaron los hechos investigados”, se lee en el informe suscrito por el fiscal séptimo delegado de Bogotá.

‘Me puso de padrino de un hijo’

A raíz del señalamiento de Rodríguez Gómez, la Fiscalía decidió llamar en calidad de indiciado como autor intelectual en el crimen de Oscar Eduardo Rodríguez Pomar al cantante vallenato Beto Zabaleta, que según el relato del sastre Carlos Rodríguez, este al igual que ‘El Ñeñe, también tendría deudas con su empresa y se habría negado a pagar.

“El día del crimen, yo generalmente los días que no estoy en mis actividades voy a mi finca que la tengo aquí cerca, voy casi todos los días, mi finca está ubicada en Baranoa, queda a unos veinte minutos de aquí de Barranquilla, esa finca se llama Los Manguitos, es un predio ganadero básicamente, tengo vacas que ordeño, tiene ochenta y cinco hectáreas, esa finca me la ayudó a comprar Carlos Rodríguez, que es una persona que conocí en los años 78 o 77, nos conocimos en una parranda vallenata, él tocaba el acordeón, se me presentó, que había escuchado mis discos y que quería ser mi amigo, no recuerdo donde fue esa parranda, desde ese día entablamos una gran amistad, que cuando yo venía a Barranquilla me quedaba en la casa de sus padres”, agregó también que los lazos de amistad se fortalecieron con el nacimiento de uno de los hijos de Rodríguez Gómez.

“Cuando nació su hijo Oscar Andrés, me puso de padrino, a todos sus hijos los vi crecer y me crié como parte de la familia”, explicó Zabaleta ante investigadores judiciales.

“En ese momento de la muerte de Óscar, Carlos me había demandado, teníamos una diferencia, nosotros compramos unos carros en Venezuela de los cuales yo le fié dos a un señor y el señor se demoró para pagar por unos intereses que injustificadamente los metió la esposa de Carlos, porque él estaba preso en ese entonces y me demandó” y agregó que “Carlos me pidió unos intereses más y yo se los pagué, luego me dio el paz y salvo de la obligación, la deuda total fue de 70 millones de pesos que yo pagué en su integridad; ellos me embargaron un apartamento en el norte de Barranquilla por un año, después volvió a la normalidad”, dijo el cantante vallenato.

El delegado de la Fiscalía preguntó al artista si conocía a alias Marquitos Figueroa, a lo que este respondió “Lo conozco de vista, hace algún tiempo lo vi en una parranda en donde él estaba pero no más, eso fue en Valledupar como en el 2010 o en el 2009, no he tenido relaciones con ‘Marquitos’ de negocios ni nada”, sostuvo el artista.

Autores materiales

La Fiscalía que lleva el caso dividió la investigación en dos fases: Autores materiales y autores intelectuales.

Sobre los autores materiales el ente investigador tuvo indicios de quiénes fueron los asesinos del joven solo días después de la muerte de Rodríguez Pomar.

A las instalaciones de la URI de la Fiscalía se acercó un hombre que conocía detalles de la muerte del hijo del ganadero. “dijo que había sido su yerno Javier Enrique Acosta Munive alias Coby, el señor se presentó con el periódico donde salió la noticia”, señala el informe investigativo de la Fiscalía que relata la visita.

Sin embargo, solo hasta el 17 de marzo de 2015 se produjo la captura de ‘Coby’ junto con su esposa Ernestina Escorcia Hernández, conocida como ‘La Manca’.

Luego de que fueran judicializados en la ciudad de Bogotá, ya en centros carcelarios de la capital del país cada uno reconoció su rol dentro del homicidio y dio pista sobre quién habría disparado por error al joven.

Los procesados, según la investigación que lleva la unidad de Bacrim del ente investigador, apuntaron a que el sicario era Diego Acuña Carvajalino, que para ese entonces (año 2014) se encontraba en un centro carcelario respondiendo por el delito de porte ilegal de armas de fuego y hurto calificado agravado.

“El atentado en el que perdió la vida Óscar Eduardo Rodríguez Pomar, no iba dirigido a él, sino al papá de nombre Carlos”, explicó Acuña Carvajalino a investigadores judiciales.

Investigadores establecieron que a alias Dieguito le dieron 8 millones antes de salir de Bogotá, cuando llegó a Barranquilla le dieron 20 millones, y que en total les dieron como 60 millones pero no les pagaron lo que habían prometido que eran $100 millones por la muerte de Rodríguez Gómez.

“Cuando acabó el trabajo (asesinato) el pago no estaba completo y a los sicarios les dijeron que esperaran una semana porque había que viajar a Riohacha a buscar la plata, que se las iba a entregar el patrón, un hombre de Santa Marta y uno de La Guajira que se llama Marquitos Figueroa”, se lee en un informe de la Policía Dijín.

Ernestina Escorcia fue encontrada culpable y paga una condena de 12 años de prisión en la Cárcel del Buen Pastor de Barranquilla.

Javier Mosquera está próximo a entrar a etapa de juicio oral en el Juzgado Especializado de Barranquilla.

Diego Acuña espera a que le sea definida su condena.

AL DÍA conoció por parte de investigadores de la Fiscalía que este caso cobró relevancia y avanzó en su etapa investigativa contra los autores intelectuales, luego de que dos lugartenientes de Marcos de Jesús Figueroa García en colaboración con el ente acusador confirmaran que hubo una reunión en una parranda vallenata donde se concertó el asesinato de Rodríguez Gómez.