ESPECIAL | Esta es la historia de Linda, la universitaria que perdió la vida por celos

Un rostro angelical que irradiaba ternura y delicadeza. Una mente brillante, sin obstáculos, con un potencial incalculable. Una joven alegre, llena de vida y con un cúmulo de sueños cumplidos y por cumplir. Esa era, según los que la conocieron, Linda Liney Velásquez Buelvas.

A los 18 años ya cursaba sexto semestre de administración de empresas en la Universidad del Atlántico, dominaba el inglés a la perfección, y los sábados estudiaba francés en el Instituto de Idiomas de esta misma Alma Máter, pues uno de sus deseos era viajar a Canadá y vivir un tiempo allá junto a su padre biológico, Eduar Velásquez. Los planes incluían y trabajar en la ciudad de Sherbrooke, en la provincia de Québec.

Todas estas aspiraciones se vinieron abajo de forma intempestiva, como un castillo de naipes, cuando a la 1:00 de la madrugada del 20 de marzo un hombre le segó la vida de dos cuchilladas, una en el cuello y otra directa al corazón. El episodio ocurrió en la calle 21C con carrera 17B, barrio Adelita de Char, en la urbanización La Playa.

Ni las técnicas elementales de reanimación que le practicó en el mismo sitio del hecho su padrastro, Alejandro García Garay, ni su arribo media hora después de ser herida a la Clínica Portoazul, lograron salvarle la vida. El coronel José Luis Palomino, comandante operativo de la Policía Metropolitana, el mismo día que se registró el asesinato calificó lo sucedido como un caso de celopatía (celos enfermizos) y señaló a la expareja de la joven como el homicida. Este fue identificado a través de un parte policial como Erneison González Villalba, de 28 años, oriundo de Antioquia.

Es propietario de una venta de licores a través de redes sociales, cuya estrategia de marketing fue creada por Linda, y hasta el último día que lo vieron su lugar de residencia era en el municipio de Malambo. Sin embargo, pese a estas y otras descripciones con las que cuentan las autoridades, catorce días después de ocurrido el crimen de la mujer número 15 en lo que va corrido del año en el Atlántico, Erneison no ha vuelto a aparecer, y la Policía tampoco ha podido dar con su paradero.

Su extraña desaparición justo después del homicidio, ha hecho inferir a familiares y amigos que el principal sospechoso del homicidio es él.

A través de redes sociales, vecinos –según dice la publicación– han hecho circular una foto de Linda y Erneison juntos para tratar de dar con él. Esa misma semana en la que Linda fue ultimada, recibió en su muro de Facebook un mensaje de parte de Erneison que decía textualmente: “Desde hace tres días tú estás agonizando”.

En redes sociales circula una petición para dar con el paradero del ex novio de Linda | Foto

Se supo que el paisa en esos dias previos al crimen, se había mostrado indignado porque Linda había terminado su relación con él el Sábado de Carnaval (6 de febrero), tras una fuerte discusión que protagonizaron en casa de la joven.

“Ella venía llegando a la casa con un primo y la novia de este, y Erneison estaba escondido cerca. Al verlos, se les abalanzó y la agarró a ella por el cuello. El primo la defendió y ambos estuvieron a punto de irse a los puños. Parece que era un ataque de celos”, dijo Alejandro García, padrastro y padre de crianza de Linda, quien desde los 11

Así se pueden identificar un celópata | Al día

La ruta de Lina antes de morir

Para la familia está claro que a través de las imágenes captadas por las cámaras de seguridad de los distintos sitios que frecuentó Linda la noche del sábado 19 de marzo, podría esclarecerse con quién estuvo y determinar a ciencia cierta quién la mató.

A las 12 del mediodía salió de su casa rumbo a la Universidad del Atlántico. El departamento de Idiomas de esa institución confirmó que asistió a clase de francés de 1 a 6 de la tarde.

A las 6:48 p.m. es captada por las cámaras de seguridad del centro comercial Portal del Prado, en la compañía de giros y finanzas internacionales Western Union. Llegó sola y retiró 548.000 pesos que su padre le había girado desde Canadá (el dinero apareció en la escena del crimen, en la cartera que portaba).

A las 10:30 p.m. fue captada por otra cámara de seguridad, esta vez en la calle 72, departiendo en un establecimiento que expende licores en compañía de Erneison González Villalba.

Esta es la última imagen que se conoce de Linda y que es analizada por investigadores de la Sijín.

“A su mamá y a mí nos causó asombro esa imagen de ella con su exnovio, porque a las 9 p.m. de ese sábado ella llamó a su mamá, o sea mi esposa, Joselina Buelvas, y le dijo que estaba departiendo con unos amigos de la universidad en la calle 72, que no se preocupara por ella, que volvería en taxi a la casa. Nosotros no teníamos ni idea de que anduviera con él otra vez. Es más, debió ser el reencuentro después de que se acabó la relación, porque ella llegaba muy puntual a la casa y se encerraba a estudiar”, aseveró García.

¿Cómo se conocieron?

El noviazgo de Linda y Erneison solo duró seis meses. Se ‘cuadraron’ en septiembre de 2015 y terminaron el 6 de febrero. El lugar donde se conocieron fue una empresa de mensajería nacional e internacional en la que ambos laboraban. Su noviazgo lo oficializaron en casa de Linda en octubre del año pasado, y Erneison supo ganarse la confianza de los padres de la agraciada joven, que lo catalogaron como “un muchacho trabajador, serio y responsable”. De acuerdo con algunas fuentes, Erneison fue courrier internacional en esa misma firma donde coincidió con Linda

Liney, y salía del país con mucha frecuencia. La familia de esta joven, recordada por muchos por su gran capacidad intelectual, contempla como una de las alternativas que el exnovio quizá se encuentre fuera del país. “No lo estoy acusando, pero hay algunas pruebas que apuntan hacia él. Por eso es necesario que se presente y entregue su versión de lo que pasó esa noche con Linda. Él no nos ha llamado, ni ha aparecido, pero lo insto a que se acerque a las autoridades competentes y aclare lo ocurrido. Este asesinato atroz, de una joven con un futuro tan promisorio, no puede quedar en la impunidad”, expresó atribulado y con lágrimas en su rostro el padrastro de Linda.

Aunque la familia de ella asegura que pocas veces vio a Erneison con actitudes de celópata, algunos vecinos y allegados a la universitaria manifestaron que las persecuciones eran constantes, incisivas, y que él no toleraba verla conversar con otras personas.

"Un Celopata es un enfermo"

José Manuel González es un psicólogo y sexólogo barranquillero, que a diario atiende en su consultorio decenas de parejas con problemas de celos. Este profesional describe la celopatía como una enfermedad mental en la cual la persona –hombre o mujer– pierde el contacto con la realidad. “El hombre o la mujer cuando su pareja es celosa, lo primero que debe hacer es pedir una terapia de pareja. Los celos no se curan con buenos consejos, se requiere de un tratamiento que es largo e intenso, para que la gente pueda salir de ese problema denominado celos patológicos”, explicó el profesional.