¿Qué Pasa?

La ‘selfie’ que tiene en la mira al director de Distriseguridad

Los funcionarios de la entidad calificaron el acto como una ‘ligereza’.

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Estupor e indignación se ha generado en diferentes sectores de opinión de los medios locales, en especial la radio, que han criticado la actitud del director de Distriseguridad, Víctor Hugo Arango, de posar en un autorretrato o ‘selfie’ con la mujer sindicada de ser la más grande proxeneta de la ciudad, Liliana Campos Puello, actualmente detenida en la Cárcel Distrital de San Diego, a la espera de un escrito de acusación por parte de la Fiscalía General de la Nación.

El hecho se presentó el pasado viernes cuando en desarrollo del Reinado de la Convivencia al interior del centro reclusorio, Arango se vio accionando un teléfono móvil al lado de Campos Puello junto a otras personas, entre ellas el reconocido actor y presentador de televisión Jairo Martínez.

[VER: ‘La madame’, la mujer acusada de proxenetismo que ahora posa como ‘celebridad’]

Lo que le critican al funcionario público, a diferencia de las otras personas que allí se encontraban, es el mensaje contradictorio que él como representante de la Administración Distrital envía a la opinión pública cuando la misma está enfocada en combatir todo rastro de prostitución a gran escala que se esté presentando en la ciudad, deteriorando mucho más la imagen lesionada de Cartagena.

RECHAZO CIUDADANO

Los directores de los noticieros radiales Carmol Noticias y Noticiero El Vigía, que se emiten en Radio Príncipe y Radio Vigía de Todelar, respectivamente, hablaron sobre el hecho que en primicia lo publicó AL DÍA el día domingo y replicado por EL HERALDO el lunes pasado.

“Es una actitud de doble moral la de funcionarios públicos hacia una persona que si bien está sindicada, está acusada de delitos relacionados con conductas que el mismo Distrito dice combatir”, dijo Carlos Mouthón Lorduy, director de Carmol Noticias.

“Me recuerda como hace años un gobernador de Bolívar, Humberto Rodríguez, se puso a bailar con la esposa de un reconocido narcotraficante sin importar lo que dijeran los presentes en un tiempo cuando el presidente de Colombia, Belisario Betancur, enfatizaba el cerrarle el paso a los narcotraficantes mientras su funcionario en Bolívar hacía lo contrario”, comentó Mauricio Portnoy Cantillo, en la nota de la sección Termómetro Político del Noticiero El Vigía.

En ese mismo sentido, el abogado Germán González, quien comentó sobre el asunto para AL DÍA dijo que el hecho fue una total indelicadeza del responsable de la seguridad de los cartageneros, resulta todo un juego de doble moral que se condena de acuerdo a la conveniencia de quien lo haga.

“Es notablemente curioso que mientras los medios de comunicación se enfilan condenando y denunciando las redes de prostitución en la ciudad, es tos mismos se lucren de avisos clasificados donde se anuncian personas que brindan servicios sexuales de forma directa. También recuerda la actitud desinteresada de toda consecuencia de servidores públicos que en la época del narcotráfico y del paramilitarismo se retrataban con esta clase de personajes sin asumir las consecuencias dichos actos”, comentó el abogado a este diario.

Varias voces periodísticas le han restado importancia al suceso toda vez que “hay mayores problemas en la ciudad y el funcionario estaba en calidad de jurado en un ambiente relajado” desprovisto del rigor que conllevan algunos cargos públicos.

Sin embargo, para el columnista radial, el ingeniero industrial Juan Conrado Ovalle, los representantes públicos “están investidos de una responsabilidad que los obliga exhibir una moralidad pública inherente a su función”.

Durante estos días el Alcalde (e) de Cartagena Pedrito Pereira podría darle una salida más calmada al señalado servidor público toda vez que hará cambios en su gabinete aunque la conducta podría acarrearle una destitución directa por parte del mandatario.