Una mujer lo atacó por no servirle un trago durante la parranda
El afectado ingresó a una clínica con heridas en la nuca, dedo y mano izquierda.
Yeimar Guerra Mendoza es el hombre de 34 años que resultó con delicadas lesiones cuando compartía con unos amigos y conocidos en una parranda. Aseguró que durante toda la noche del sábado y la madrugada del domingo la fiesta estuvo tranquila, todos disfrutaban de la música y los tragos, pero entrada la mañana hubo disgusto y una mujer terminó agrediéndolo.
“Eso fue en la calle 27A con carrera 7, ahí estábamos tranquilos tomando hasta que un amigo escuchó que una muchacha dijo que me iba a dar con una botella, yo no presté atención y ella cumplió su amenaza”, narró Guerra Mendoza.
NO SIRVIÓ UN TRAGO
El joven indicó que al parecer, a la mujer le molestó que él no le sirviera un trago, y cuando nuevamente tomó la botella para repartir el licor, ella tomó una botella y se le abalanzó. “Un amigo me dice ¡pilas que te van a dar con la botella! Mi reacción fue irme para encima de ella, pero otro tipo me agarró por la espalda y me dejó sin movimiento, es ahí cuando ella y otra persona me agredieron”, dijo el herido.
Yeimar Guerra resultó con lesiones en su dedo y mano izquierda, y una herida abierta profunda en la nuca. “Yo no tuve cómo defenderme porque ellos me agarraron, por eso traté de meter de la mano y fue cuando me dieron, y la otra herida en la nuca que me dejó mal y es una zona delicada”, dijo el herido.
Los demás amigos de Yeimar salieron en su ayuda y lo trasladaron de inmediato a una clínica de la ciudad, ya que estaba sangrando en grandes proporciones.
PRESENTÓ LA DENUNCIA
Tras ser dado de alta, el afectado se presentó ante las autoridades para presentar la denuncia correspondiente. “La Fiscalía me recibió la denuncia por lesiones personales, y ya ellos se encargarán de hacer lo correspondiente, ya que las heridas son de consideración, y me trasladaré a Medicina Legal para que ellos también hagan lo pertinente” dijo Yeimar Guerra.
Indicó un familiar del joven no es posible que en una fiesta donde se supone están compartiendo varios amigos se genere una agresión de tal magnitud. “Gracias a Dios que está vivo. Definitivamente cuando la gente está bajo el efecto del alcohol cualquier detalle es motivo de disgusto”.