Siguen conociéndose detalles sobre la muerte de Eduardo Pinto Viloria, ex director de Medicina Legal.
Johan Enrique Beltrán Ulloque, uno de los tres confesos homicidas, declaró que le compró un celular a Dayana Jassir para poder comunicarse y evitar problemas. Y que la mujer sí le había comentado sobre un seguro de vida, pero no entró en detalles.
“En una ocasión me dijo que me iba a comprar un carro para que mi esposa no me estuviera humillando por el que tengo. El millón y medio inicial lo saqué de un cajero de Bancolombia que está ubicado en la calle 47 con carrera 21 porque yo manejaba la cuenta bancaria de ella”, señaló Johan Beltrán ante la Fiscalía este marte en la mañana.
El testimonio que rindió a la Fiscalía Beltrán Ulloque permitió que agentes de la Dijín capturaran a Dayana Yael Jassir De la Hoz, esposa de la víctima.
Dayana Jassir, tras ser capturada en el Centro de Servicios.
“La idea de matar a Eduardo nació de Dayana”, aseguró Beltrán a la Fiscalía en declaración bajo juramento.
La detención de la mujer se produjo a las 8 de la mañana del lunes en el Centro de Servicios, cuando llegaba para asistir a la audiencia de solicitud de medida de aseguramiento contra Beltrán y los otros implicados en el homicidio: Jesús Gutiérrez, alias ‘Chucho’; y Miguel González, ‘Migue’. El conductor reveló, además, que mantuvo durante casi un año una relación sentimental con ella.
Ayer se decretó legal la captura de Dayana Jassir De la Hoz, a quien se sindica de participar en el homicidio de su marido.
“Yo tenía una relación sentimental con Dayana desde hace un año, desde abril de 2015, teníamos encuentros ocasionales. Una vez que viajamos la recogí en la puerta de su casa a las 3:30 de la mañana. En el viaje se dio un cruce de miradas y cuando llegamos a Riohacha hicimos el intercambio de números y, de ahí en adelante, quedó de clienta mía. De ahí en adelante se generó una confianza que la transportaba en la ciudad y les hacía las vueltas personales a ella y al esposo”.
Esta foto habría sido captada durante el pasado cumpleaños de Beltrán. Queda en evidencia el romance entre ambos.
Beltrán agregó que la última vez que estuvo con Jassir fue este año, después de la época de Carnaval, ya que ella se enfermó. Quedaron “como amigos”, aunque seguía transportándola.
“Quince días antes del homicidio viajó Dayana conmigo a Riohacha y retornamos a Barranquilla, la llevé a su casa; siete días después fue a Santa Marta, la dejé ahí y la recogí de bajada. Después de eso volvimos a vernos el viernes en la noche o sábado en la noche, después la volví a ver el martes que la fui a recoger al trabajo”.
En una de esas jornadas, añadió el chofer, la mujer almorzó en el carro Kía que él conducía, la llevó a buscar el uniforme de su hijo y luego “las cosas para el desayuno”. Al final, la llevó hasta su casa.
POR FALTA DE AFECTO
De acuerdo con la declaración del capturado, su amorío con Jassir “nació porque el esposo sufría de disfunción eréctil y por la falta de afecto”, entre ella y Pinto.
“No quería seguir viviendo con él, y me dijo que buscara la forma de matarlo. Dayana me dio el número de una persona, que a su vez me dio el número de ‘Chucho’, y entonces yo contacté a ‘Chucho’”.
Eduardo Pinto Viloria y Dayana Jassir De la Hoz contrajeron matrimonio en el año 2008.
Beltrán atribuyó a su examante toda la responsabilidad del plan criminal,incluso, lo financió, es decir dio el dinero.
“Ella me dio la orden de matarlo y me dio el número de la persona que me contactaría para hacer el trabajo, de ahí es donde me comunicó con ‘Chucho’ para cuadrar el trabajo. La primera plata que yo di fue un millón 500 mil pesos, esa plata me la dio Dayana unos días antes; yo le entregué la plata a ‘Chucho’ en la carrera 19 con Murillo. El resto de plata no sé cómo se lo entregaron a ‘Chucho’”.
MANDARON PARA LA CÁRCEL A ASESINOS DE PINTO
En la mañana del lunes el juez penal municipal ambulante contra bandas criminales, Ricardo Méndez Díaz, dictó medida de aseguramiento en la Penitenciaría de El Bosque contra los tres confesos asesinos del entonces director regional de Medicina Legal, Eduardo Pinto Viloria.
Los procesados fueron individualizados por las autoridades como Johan Enrique Beltrán Ulloque, chofer de confianza del médico y su esposa; Miguel Ángel González Reales, conductor del taxi que transportó a los sicarios el día del crimen, y Jesús Antonio Gutiérrez Arrieta, ‘Chucho’, uno de los criminales contratados.
Para Méndez las evidencias de la Fiscalía, entre esas el interrogatorio rendido por ‘Chucho’, son indicios de que “están dejando por encima la probabilidad”, y dan certeza de que los capturados participaron en el plan que desembocó en la muerte de Pinto, el pasado 4 de mayo.
“Está claro que existe una participación en hechos delictivos antes y después del homicidio”, sentenció Díaz.
En la audiencia de imputación de cargos realizada el viernes, Gutiérrez, Beltrán y González aceptaron la autoría de los delitos concierto para delinquir, homicidio agravado, hurto calificado agravado y porte ilegal de arma de fuego.
Este medio ha divulgado ampliamente detalles de la declaración que alias ‘Chucho’ entregó el jueves en la Uri de la Fiscalía, horas después de que los arrestaran a los tres. Con ella se ha ido desenredando la madeja en este caso que en inicialmente trataron de hacer ver como un robo, pero en realidad se trató de un homicidio premeditado y previamente concertado por causas pasionales.
DISCULPAS PÚBLICAS
Gutiérrez y González volvieron a pedir perdón por haber participado en el asesinato del exfuncionario Pinto Viloria, esta vez ante los medios de comunicación. Ya lo habían hecho el viernes en la audiencia ante el juez.
“Fui engañado sobre este caso. Le pido perdón a la señora madre y a toda Colombia. Perdónenme. Es de hombres equivocarnos. Me equivoqué. Reconozco mi error”, dijo alias ‘Chucho’, al finalizar la diligencia judicial. A la pregunta de “¿qué vinculación tuvo la esposa de Pinto en la organización del crimen?”, Chucho solo se limitó a responder: “Total, total”.
Jesús Gutiérrez Arrieta, alias ‘Chucho’, pidió disculpas.
Por su parte alias ‘Migue’ expresó: “Solo le pido perdón a la familia de él (Eduardo Pinto) por lo que sucedió. La verdad yo fui un involucrado más en esto. Simplemente presión fue lo que yo tuve ante todo esto que pasó. Sinceramente fue culpa mía y le pido perdón a todos aquellos que piensan mal de mí. Fui engañado”.
Miguel González Reales, alias ‘Migue’, conducía el taxi.
A sus disculpas públicas se sumó Beltrán, quien el viernes le había respondido en medio de la audiencia: “No tengo nada de qué pedir perdón”.
El chofer justificó su actitud con que ese día “estaba confundido”, y “no sabía ni qué decir”, dijo, dirigiéndose a una hermana, la mamá y un tío de Pinto, presentes en la sala. El subcomandante de la Policía Metropolitana, coronel Juan Carlos Nieto, dio a conocer además de que entre Beltrán y la esposa del fallecido director regional de Medicina Legal. “había una relación personal”.
Johan Beltrán Ulloque, chofer de confianza de la familia.
Esto fue corroborado también por el juez bacrim asignado a este caso, Ricardo Méndez, quien sostuvo que “todo apunta a un tema pasional”, y aseguró que existía “un vínculo entre la viuda y el señor Beltrán”.