La pérdida del deseo es algo normal en muchas parejas que llevan mucho tiempo juntos y precisamente al respecto una de nuestras fieles lectoras nos escribió lo siguiente: “Apreciado Don Juan, tengo más de 8 años de relación y siento que la pasión se ha perdido un poco, por lo que me gustaría que me orientara acerca de cómo poder recuperarla”.
Esta suele ser una situación incómoda para quienes la viven, pues para nadie en un secreto lo difícil que resulta tener un encuentro sexual sin mayor emoción y de la misma forma como se viene practicando desde hace mucho tiempo.
La rutina, es una de las mayores preocupaciones en pareja, puesto que las responsabilidades, sumadas a la falta de ideas durante el sexo, llegan a crear un ambiente aburridor para ambos que se puede traducir en poco interés a la hora de tener relaciones.
Además, el terrible estrés que afecta a gran parte de la población en la actualidad, toma juego dentro de la pareja y afecta la relación de una u otra manera, llegando a dificultar el deseo y la pasión dentro del romance.
Pero, aparte de esas situaciones comunes y difíciles que se presentan en un largo noviazgo o matrimonio, también está el simple pensamiento de ya no saber qué más hacer para innovar en la cama o cómo sorprender al otro con un truco que logre excitarlo nuevamente.
Muchas veces, se sostienen las relaciones sexuales dentro de lo que ya están habituados a hacer. No surge nada novedoso dentro del encuentro, que llegue a despertar esa pasión desenfrenada que estaba en un principio cuando ambos estaban explorando la cantidad de formas en las que podían hacerlo.
Ahí es cuando se siente que la pasión está perdida, que no hay nada para recuperar ese candente deseo que les brindó tantos buenos ratos. Sin embargo, eso muchas veces va la forma de pensar y en la falta de buscar ideas para mejorar la situación. Pues sí existen algunos consejos útiles para ir recuperando esa chispa de la intimidad.
Buscar momentos
No solo espere a que se dé nuevamente el contacto con él/ella, sino busque y planee un encuentro que pueda ser diferente a lo que acostumbran a hacer. Identifique el instante perfecto para seducir a su pareja y llevar a cabo eso que planificó, sin que pueda haber algo que los interrumpa.
Hablar de fantasías
El diálogo es importante para la relación en general, y en cuanto al sexo también es una herramienta fundamental para hablar de todas aquellas fantasías que tal vez tienen muy ocultas y no han querido compartir. Cuando se comunica a la pareja algo que siempre se ha deseado, se abre una brecha para hacer algo nuevo. Y más allá de charlarlo se debe buscar la manera de llevarlo a cabo.
No evadir el deseo
Siempre va a haber un momento en que alguno de los dos llega a ser indiferente ante las ganas del otro, sin embargo, esta no es una actitud aconsejable. Se debe tratar de complacerse mutuamente cuando hay una insinuación. Si en algún momento definitivamente no se quiere hacer, se debe comunicar el motivo y no dejar en duda el por qué no se quiso tener sexo en esa oportunidad.
Explorar el cuerpo
Una técnica muy eficaz es el contacto físico en el que se puedan incluir todos los sentidos. Básicamente es que ambos se acaricien, se sientan, huelan y observen cada parte del cuerpo, pero ojo, sin buscar la excitación sexual, simplemente dándose un espacio para detallar la persona de la que se enamoró y así despertar nuevamente esa parte de admiración y deseo mutuo.